MADRID, 15 Oct. (EUROPA PRESS) -
La organización internacional para la protección de los derechos de infancia, Plan, considera que la clave para romper el círculo de la pobreza es invertir en la educación de las niñas, según concluye un informe redactado con motivo del Día Internacional para la Erradicación de la Pobreza.
El estudio 'Las niñas en la economía global' señala que las mujeres con estudios son activas generadoras de riqueza. Además, advierte de que los países con el menor número de niñas escolarizadas están a la cola en la lista de índices de desarrollo humano.
En ese sentido, recuerda que más de 500 millones de niñas y adolescentes ven limitado su acceso a la educación y la oportunidad de convertirse en adultas con plena capacidad para incorporarse al mercado laboral.
Asimismo, explica que un año extra de educación secundaria para una niña puede aumentar sus ingresos como mujer, entre un 10 y un 20 por ciento anual, dinero que invierte casi en su totalidad en el hogar y que repercute en el bienestar de su familia y también en el de su comunidad y su país.
La directora general de Plan en España, Concha López, ha señalado que "en Africa, Asia y América Latina las mujeres con siete o más años de educación tienen entre dos y tres hijos menos que las mujeres con menos años de estudio". Por ello, asegura que "garantizar el acceso a la educación de las niñas es un dinamizador de cualquier economía, desde la del hogar hasta la de la comunidad y el país".
Por otro lado, Plan, a través de su campaña 'Por Ser Niñas', trabaja en 65 países para conseguir que las niñas tengan los mismos derechos que los niños y que desaparezcan tratamientos discriminatorios a los que se ven sometidas por causa de edad y género, como el matrimonio temprano, la ablación sexual o la limitación al acceso escolar, que limitan el desarrollo de su potencial como mujer.
