Actualizado 22/01/2010 19:36

Cooperantes españoles denuncian que Israel retira el permiso de trabajo al personal humanitario desplazado en la regió

Piden al Consulado español que intervenga "cuanto antes" porque temen ser detenidos y deportados


MADRID, 22 Ene. (EUROPA PRESS) -

Cooperantes españoles afincados en Oriente Próximo han denunciado que el Gobierno israelí ha comenzado a retirar el permiso de trabajo al personal humanitario internacional, aprovechando el momento de las renovaciones para reemplazar su autorización por un visado de turista que no les permite desempeñar ninguna actividad remunerada en el territorio declarado parte del Estado de Israel, como Jerusalén Este.

Según explicó en declaraciones a Europa Press una cooperante española afincada en Jerusalén Este, la tramitación de los visados, que antes correspondía al Ministerio israelí de Asuntos Sociales, "depende desde septiembre del Ministerio de Defensa", que en lugar de renovar los permisos los reemplaza por visados de turista de una duración variable que va desde "unas pocas semanas hasta un año" y lo hace "sin dar explicaciones".

Esta cooperante, que prefiere permanecer en el anonimato por temor a posibles represalias, reconoció que existe "miedo" entre los trabajadores humanitarios europeos, que a menudo tienen que enfrentarse a controles de seguridad para cruzar de territorio palestino a suelo israelí desempeñando una tarea sin estar autorizados.

"Esto implica que legalmente no puedo trabajar, cuando es obvio que estoy trabajando porque viajo en un coche con el logo de la organización, el ordenador portátil y el chaleco distintivo, es decir, que no tengo precisamente pinta de turista", explicó la joven, que indicó que hay otros cooperantes españoles en su misma situación.

La trabajadora humanitaria perdió su permiso de trabajo hace unos días, cuando al renovarlo recibió uno de turista con validez de un año. Siempre según su testimonio, al preguntar el porqué de esa modificación en su estatus, la única respuesta que obtuvo es que ya que su organización trabaja para el pueblo palestino "tendría que tener un visado sólo para trabajar en territorio palestino". "Lo que pasa es que eso es sólo un 30 por ciento del territorio que nosotros consideramos Palestina", apostilló.

SÓLO PUEDEN TRABAJAR EN TERRITORIO PALESTINO

El principal problema es que esta organización española, al igual que muchas otras, tiene su sede en Jerusalén Este, zona deprimida donde viven 250.000 palestinos y que pese a haber sido declarada internacionalmente como perteneciente a Palestina --la comunidad internacional apoya que sea la capital del futuro Estado palestino--, está controlada por Israel. "Si me cogen en la sede me pueden detener y seguramente me deportarían, por lo que nunca más podría volver porque se me declararía enemiga del Estado de Israel", apuntó.

En su opinión, se trata de una "estrategia de Israel para echar poco a poco a los cooperantes por lo menos, de Jerusalén", por lo que piden al Consulado español que "haga algo cuanto antes y que se informe de lo que está pasando porque el momento es ahora".

"Aquí somos muchos y no nos van a echar a todos de golpe. Lo están haciendo poco a poco, con la excusa del visado de turista. El Consulado español debería reaccionar cuánto antes, porque a mí me pueden detener en cualquier momento y son ellos quienes me tienen que respaldar. Si no lo arreglan, creo que en un par de años estaremos todos fuera de aquí", lamentó.

Un portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores y de Cooperación indicó a Europa Press que el departamento sólo tenía constancia, por el momento, de que se ha producido "algún retraso en la concesión de visados de tipo B1", con el que trabajaban hasta la fecha los cooperantes.