MADRID, 24 May. (EUROPA PRESS) -
Manos Unidas ha señalado que la crisis financiera global "que afecta en mayor o menor medida a todos los países del mundo, se ha traducido en un aumento del hambre y la pobreza en África", con hasta 16 millones de personas viviendo con menos de 1,25 dólares al día "según las cifras más pesimistas", con ocasión del día de África que se celebra el días 25 de mayo.
En este sentido, la ONG ha explicado que la caída de los precios de las materias primas, el descenso del turismo, la reducción de las remesas y el retorno de muchos de los emigrados, junto con el aumento del desempleo, "han llevado a que el crecimiento económico del contiene africano se sitúe en un 1,6 por ciento en 2009, frente al 4,5 por ciento de 2008 y el 6 por ciento promedio de 2002 a 2008".
De esta forma, la organización ha lamentado que África vaya a ser "el único continente en el que no se va a cumplir el primero de los Objetivos de Desarrollo del Milenio: erradicar la pobreza extrema y el hambre". En cualquier caso, en un comunicado, ha indicado que tiene "grandes esperanzas" puestas en el continente africano, "en sus jóvenes y en sus mujeres" y, por ello, en lo que va de campaña ha aprobado "61 proyectos de desarrollo en el continente, con una inversión de casi 2,5 millones de euros".
Las esperanzas se centran en que "el continente africano posee enormes riquezas naturales y un grandísimo potencial humano, garantizado por la extrema juventud de su población", ha explicado la ONG que, sin embargo, ha lamentado que "las leyes de comercio poco favorables, los intereses económicos de empresas occidentales y los altos niveles de corrupción interna, impidan que África alcance los índices de desarrollo que por derecho le corresponden". Así las cosas, ha advertido de que "son muchos los expertos que señalan que la crisis económica actual ha demostrado que el desarrollo de África no puede ni debe depender sólo de la ayuda externa".
Manos Unidas (www.manosunidas.org) es una Organización No Gubernamental para el Desarrollo (ONGD) católica, de voluntarios, que desde 1960 lucha contra la pobreza, el hambre, la malnutrición, la enfermedad, la falta de instrucción, el subdesarrollo y contra sus causas.
