Actualizado 24/04/2013 16:21

HRW denuncia una "represión sin precedentes" contra los DDHH desde que Putin es de nuevo presidente

MADRID, 24 Abr. (EUROPA PRESS) -

La ONG Human Rights Watch (HRW) ha advertido este miércoles de que los Derechos Humanos han sufrido una "represión sin precedentes" en Rusia, desde que el presidente, Vladimir Putin, accedió al cargo en mayo de 2012.

Según el informe de 78 páginas, desde que Putin es jefe de Estado, las autoridades han introducido una serie de leyes "restrictivas", entre las que se incluye una campaña nacional de registros en oficinas de ONG, acosos, intimidaciones y detenciones de activistas políticos, así como intentos para silenciar a los más críticos con el Gobierno al considerarlos "enemigos clandestinos".

"La nueva legislación y el acoso del Gobierno están dejando a los activistas civiles al margen de la ley ", ha declarado el director de HRW para Europa y Asia Central, Hugh Williamson. "La ofensiva del Ejecutivo está haciendo daño a la sociedad rusa y al prestigio internacional del país" ya que viola los compromisos internacionales de Rusia en materia de Derechos Humanos, ha proseguido.

Además, según la organización, varias de esas leyes tratan de limitar, o incluso finalizar, "la independencia de la defensa", fijando nuevos límites draconianos en relación con ciudadanos y financiación extranjeros. La ley de los "agentes extranjeros" exige a las organizaciones que reciben fondos de fuera del país y que participan supuestamente en "actividades políticas" que se registren como "agentes extranjeros".

Otra ley, adoptada en diciembre, prohíbe que Estados Unidos financie la actividad "política" de las ONG por considerar que su trabajo está "dirigido contra los intereses de Rusia", según el comunicado. La Ley de Traición de la Patria, la tercera ley de la que habla Human Rights Watch, amplía la definición legal de traición de modo que podría considerarse delito la promoción internacional de los Derechos Humanos.

El documento ha resaltado que en la campaña de inspecciones a oficinas de ONG han estado involucrados funcionarios de la Fiscalía, el Ministerio de Justicia, inspectores de Hacienda e incluso la Policía antidisturbios e inspectores de Salud y de Incendios. La operación de registros empezó en marzo de 2013 y fue motivada por la Ley de Agentes Extranjeros.

"El Gobierno afirma que los registros son pura rutina, pero la realidad no es esa", ha destacado Williamson. "La campaña no tiene precedentes tanto por su alcance como por su escala y parece claramente destinada a intimidar y marginar a la sociedad civil", ha continuado.

"AGENTE EXTRANJERO"

"El término 'agente extranjero' es utilizado en Rusia para referirse a los espías o traidores y es muy difícil evitar la sensación de que, al adoptar esta ley, las autoridades rusas han tratado de desacreditar y demonizar a grupos de la sociedad civil que aceptan financiación extranjera", ha subrayado Williamson.

Human Rights Watch ha instado al Gobierno ruso a que ponga fin a la represión contra la sociedad civil y a que respete los derechos civiles y políticos para fomentar un ambiente en el que la sociedad civil pueda prosperar.

A su vez, ha exigido que se deroguen las disposiciones jurídicas "excesivamente restrictivas" y se sigan las recomendaciones de las organizaciones intergubernamentales como el Consejo de Europa y Naciones Unidas para que tanto la legislación como las prácticas rusas estén "en consonancia con el Derecho Internacional".