Actualizado 30/05/2013 13:42

HRW pide a Grecia medidas urgentes contra la violencia racista

MADRID, 30 May. (EUROPA PRESS) -

   La ONG Human Rights Watch (HRW) ha instado este jueves al Gobierno griego a que adopte "medidas urgentes" para poner fin a los delitos por odio y proteger a las víctimas.

   Según el comunicado divulgado por la organización, hasta el momento no se ha presentado en el Parlamento un proyecto de ley sobre la incitación al odio y la violencia racista debido al desacuerdo entre los tres partidos de la coalición gobernante --Nueva Democracia (centro-derecha), Izquierda Democrática (DIMAR) y el Movimiento Socialista Panhelénico (PASOK)-- sobre su ámbito de aplicación.

   "Con la gente siendo atacada en las calles, Grecia necesita urgentemente reforzar la respuesta de la justicia contra los delitos por odio", ha declarado el investigador de HRW para Europa Occidental Judith Sunderland.

   Una de las versiones del proyecto de ley, de acuerdo con la ONG, estaría enfocada en la protección de los migrantes que son víctimas de abusos y que no denuncian los hechos ante el miedo de que ellos o sus familias puedan ser deportados.

MIEDO A LA DEPORTACIÓN

   Sunderland ha afirmado que el miedo a la deportación hace que los "inmigrantes indocumentados" que son víctimas de abusos a manos de la Policía los disuada de denunciar los hechos. En febrero de 2013, la organización escribió una carta al ministro de Justicia en la que describía los pasos legislativos necesarios para asegurar una "respuesta eficaz" contra los delitos de odio.

   En concreto, ha afirmado HRW, el Parlamento debe incluir una  disposición para exigir a la policía que abra una investigación obligatoria por los delitos de odio sin que las víctimas tengan que pagar una tasa de 100 euros cuando presenten su denuncia.

   Adicionalmente, ha subrayado la ONG, el ministro de Justicia tendría el poder de prohibir la creación de asociaciones en caso de que uno de sus miembros hubiese cometido algún delito por odio, incluido la negación del mismo.

   Del mismo modo, la medida de prohibir una organización, lo cual es difícil de conciliar con el derecho a la libertad de asociación, debe ser revisado para su compatibilidad con los estándares de los Derechos Humanos, de acuerdo con el comunicado.

   "Hay preocupaciones legítimas sobre el alcance excesivamente amplio de algunas disposiciones de este proyecto de ley, pero eso no debe ser una excusa para la inacción", ha enfatizado Sunderland. "El Parlamento debería tener la oportunidad de debatir y mejorar el proyecto de ley en línea con las obligaciones de Grecia en relación con los Derechos Humanos".

   Los actos violentos continúan, con 217 agresiones racistas entre octubre de 2011 y diciembre de 2012, según las últimas cifras de la red nacional sobre violencia racista. Sin embargo, a pesar de ese dato, y según HRW, Grecia ha dado algunos "pasos positivos" recientemente.