Actualizado 15/04/2009 14:37

HRW rechaza la ley afgana que prohíbe a las mujeres abandonar el hogar sin permiso y rechazar relaciones sexuales

MADRID, 15 Abr. (EUROPA PRESS) -

El Gobierno de Afganistán debe rechazar la nueva ley que regula el matrimonio, el divorcio y la herencia para la población chií del país, e incluye disposiciones que establecen que una mujer pida permiso para abandonar el hogar excepto por una cuestión urgente y les prohíbe rechazar las relaciones sexuales cuando su marido quiera, según denuncia la organización defensora de los Derechos Humanos Human Rights Watch (HRW).

La organización también manifestó que la Administración debe escuchar a las mujeres afganas que mantendrán hoy una protesta, con gran riesgo personal, y rechazar o reformar la ley del Estatus Personal Chií, que, entre otras cuestiones, les obliga a "maquillarse" o "arreglarse" para su marido cuando se lo pida.

"El presidente, Hamid Karzai, no debería sacrificar a las mujeres para hacer un acuerdo político a corto plazo", señaló el director de HRW para Asia, Brad Adams. "Está jugando con fuego, ¿cómo podrá rechazar las peticiones para leyes discriminatorias de otras comunidades?", añadió.

Las mujeres en el Parlamento se quejan de que la tramitación de la ley ha sido acelerada con la ayuda de varios líderes chiíes prominentes. A pesar de las peticiones de defensores de los derechos de las mujeres para que no se firmara la ley, Karzai la firmó en un supuesto intento de conseguir apoyo político de parte de las facciones políticas más poderosas de Afganistán, señala HRW.

Las disposiciones de la ley contradicen directamente la Constitución afgana, que prohíbe cualquier tipo de discriminación y distinción entre los ciudadanos del país. El artículo 22 de la misma subraya que los hombres y las mujeres "tienen los mismos derechos y deberes ante la ley". La ley también contraviene la Convención de la Eliminación de Toda Forma de Discriminación contra las Mujeres, de la que Afganistán es un estado firmante.

"Todo lo que quieren las mujeres afganas es ser libres, esto es por lo que se manifiestan", señaló un activista afgano que ayuda a organizar la protesta. "Esta ley es ridícula, las mujeres no pueden creer que es real, intenta eliminar nuestras libertades, así que tenemos que denunciarlo", añadió.

Mientras Karzai ha pedido al Ministerio de Justicia que revise la ley, HRW muestra su preocupación porque dicha revisión no sea independiente, ya que aquellos que lideran el proceso en este Ministerio tienen sus raíces en el chiismo conservador. Aún así, la organización ha agradecido la preocupación mostrada por otros gobiernos como el estadounidense, el británico, el francés o el italiano, entre otros, así como la OTAN, aunque precisa que estas Administraciones deben seguir presionando para que se den los cambios necesarios en la ley.

"El Gobierno afgano ha manifestado sus compromisos para proteger los derechos de las mujeres, y debe actuar en base a estos compromisos y rechazar o reformar una ley que infringe de manera desastrosa las libertades básicas", señaló Adams.

Muchos de los activistas que han denunciado la ley han recibido amenazas, y sus temores se han acrecentado tras el asesinato esta semana de una prominente defensora de los derechos de las mujeres, Sitara Achakzai, que fue disparada en Kandahar después de recibir amenazas de muerte.