MADRID, 20 Sep. (EUROPA PRESS) -
La organización no gubernamental Movimiento contra la Intolerancia ha pedido al ministro de Asuntos Exteriores y Cooperación, Miguel Ángel Moratinos, que los representantes y diplomáticos españoles abandonen la sala cuando se produzca la intervención del presidente de Irán, Mahmud Ahmadineyad, ante la Asamblea General de la ONU, "como inequívoca señal de protesta" contra las "muy graves" violaciones de Derechos Humanos que se cometen en el país.
En carta abierta al ministro, el presidente de la organización, Esteban Ibarra, expresó este lunes su "preocupación y queja" por la intervención de Ahmadineyad ante la Asamblea, prevista para el 23 de septiembre, "por cuanto significa legitimar una práctica de vulneración muy grave de los Derechos Humanos así como desoír el sufrimiento de las víctimas y de ciudadanos que denuncian esa práctica".
"La gravedad de la situación en Irán exige un compromiso público y expreso de las democracias en defensa de los Derechos Humanos", aseveró Esteban Ibarra. "Por eso le pedimos, señor ministro, que nuestra representación en Naciones Unidas adopte un gesto de condena a esas violaciones muy graves de los Derechos Humanos y le demandamos que requiera abandonar a los diplomáticos y representantes españoles presentes en la sala de Naciones Unidas cuando Mahmoud Ahmadineyad tome la palabra, como inequívoca señal de protesta", manifestó.
Según Ibarra, en Irán se registran "350 ejecuciones al año de media, casi una ejecución diaria", lo que le convierte en "el país con más ejecuciones del mundo después de China". Aparte, Irán y Arabia Saudí son "los dos únicos países musulmanes con ejecuciones públicas", añadió.
"Más de 4.000 homosexuales han sido ejecutados, en su mayoría mediante ahorcamiento en grúas", prosiguió. "Hay ocho mujeres y dos hombres pendientes de lapidación, como el caso mundialmente conocido de Sakineh Ashtiani, condenada a morir lapidada", advirtió.
Asimismo, "la represión mediante detenciones, torturas, prisión y ejecuciones se extiende a líderes sindicales, opositores y periodistas" y desde la reelección de Ahmanideyad "se han cerrado 29 periódicos, han detenido a más de 130 profesionales de los medios de comunicación y otros 60 se han visto obligados a marcharse", agregó.
La carta abierta destaca también que, según la Organización Internacional del Trabajo (OIT), "muchos trabajadores, en especial los extranjeros, siguen sin disfrutar de derechos sindicales y aquellos que intentan ejercer sus derechos se ven confrontados a una durísima represión en Irán". Ejemplo de ello, explicó, es que "numerosos líderes sindicales y opositores están en prisión".
"Un régimen tiránico no puede dirigirse a los Estados democráticos en pie de igualdad", aseveró el Movimiento contra la Intolerancia. "Escuchar la voz de Ahmadineyad significa transigir con estas violaciones de Derechos Humanos y con prácticas inhumanas muy frecuentes en Irán".
Aparte, precisó Ibarra, Irán está considerado "el Estado más activo en el patrocinio de las actividades terroristas en el mundo", como "informa e insiste oficialmente el Gobierno de Estados Unidos".
