Actualizado 01/02/2010 18:12

Una ONG pide al TPI que investigue la violencia que dejó cientos de muertos en Nigeria


LONDRES, 1 Feb. (EUROPA PRESS) -

Una organización pro Derechos Humanos de Nigeria pidió este martes al Tribunal Penal Internacional (TPI) que investigue la violencia que se produjo entre musulmanes y cristianos en la ciudad nigeriana de Jos, en el centro del país, y que se saldó con un elevado número de muertos.

El grupo, conocido como Serap, escribió al fiscal jefe del TPI, Luis Moreno Ocampo, para pedirle que abra una investigación por la muerte de al menos 326 personas en los enfrentamientos, informa la BBC, que señala que los activistas también quieren que el Ejército y la Policía investiguen las denuncias de que estas fuerzas utilizaron un uso excesivo de la fuerza para restaurar el orden.

Los musulmanes y cristianos se enfrentaron durante varios días y, aunque la cifra de muertos que ha dado la Policía permanece en 326, otras estimaciones la superan, mientras que los líderes musulmanes de la zona aseguran que los muertos musulmanes son 364. Los líderes cristianos no han confirmado la cifra de muertos por estos disturbios por cuya conexión han sido detenidas más de 300 personas.

La carta escrita por el abogado Femi Falana afirma que el TPI debería asumir la causa porque no es probable que el Gobierno de Nigeria tome medidas. "Aquellos que son sospechosos por haber provocado el último brote de violencia y los enfrentamientos anteriores no han sido detenidos, y mucho menos han sido llevados ante la Justicia", señala la carta de Falana.

"El Gobierno ha demostrado que es demasiado débil para actuar, en contra de sus obligaciones jurídicas internacionales, incluido el Estatuto de Roma", añade. Mientras, la violencia ha empeorado las relaciones entre el estado de Plateau --donde está situada Jos-- y el vecino estado Bauchi.

Algunos diputados de Bauchi, mayoritariamente musulmán, ya han manifestado que quieren que todas las personas procedentes de Plateau, con mayoría cristiana, regresen a sus hogares. Los diputados de Bauchi arguyen que la violencia demuestra que, como los indígenas de Plateau no respetan el derecho constitucional a vivir y trabajar en cualquier parte del país, ellos tampoco deben disfrutar de estos derechos en otros estados.

Varios miles de personas aún siguen desplazadas, después de abandonar sus casas para escapar de la violencia. Los analistas afirman que la causa real de la violencia es una lucha para conseguir la superioridad política en la ciudad.