ABIYÁN, 26 Ago. (Reuters/EP) -
Las fuerzas de seguridad de Costa de Marfil que abrieron fuego contra los manifestantes el pasado mes de febrero terminando con la vida de al menos once personas lo hicieron en parte debido al embargo de armas, que ha causado que el país tenga dificultades a la hora de importar armamento no letal, según aseguró este jueves Naciones Unidas.
Al informar de los resultados de una investigación sobre las manifestaciones violentas que se alargaron durante semanas, un informe de la ONU indica que las fuerzas marfileñas terminaron con la vida de trece personas, once recibieron disparos y dos fueron golpeadas hasta la muerte, y otros 76 civiles y 18 policías o soldados fueron heridos.
"Vamos a pedir al Gobierno que tome medidas para que las fuerzas de seguridad del país consiga herramientas convencionales para mantener el orden", indicó el jefe para Derechos Humanos de la misión de la ONU, Simon Munzu.
"No se mantiene el orden mediante las armas de fuego. Esto es por lo que estamos pidiendo a la comunidad internacional que haga una excepción en el embargo para importar armas (...) para el equipamiento antidisturbios", añadió.
El embargo de venta de armas a Costa de Marfil del Consejo de Seguridad de la ONU ha estado en vigor desde 2004, mientras el Gobierno asegura que sus soldados y policías están mal equipados debido al mismo.
Las protestas surgieron en el país de África Occidental cuando el presidente, Laurent Gbagbo, disolvió el Gobierno y la comisión electoral en febrero debido a la disputa sobre el proceso para registrar a los votantes que tenía por objetivo unas elecciones que se habían retrasado durante mucho tiempo.
El informe, leído por Munzu, acusa a las fuerzas marfileñas pero también a los rebeldes del norte, donde se desarrollaron algunas de las protestas, de "violaciones de Derechos Humanos graves (...), ejecuciones sumarias (...), arrestos arbitrarios (...) y uso desproporcionado de la fuerza".
Entre la última afirmación se incluyen los disparos contra los manifestantes armados con piedras y las "expediciones de castigo", como disparar gases lacrimógenos dentro de hogares, iglesias y mezquitas largo tiempo después de que se terminaran los disturbios.
El Consejo permanece reacio a levantar el embargo hasta que Costa de Marfil celebre las elecciones necesarias para reunificar el país. Se espera que los comicios se celebren el 31 de octubre.
