Actualizado 20/10/2010 14:54

Remodelación.- Ecologistas celebran la salida de Espinosa y piden a Rosa Aguilar que "se ponga las pilas"


MADRID, 20 Oct. (EUROPA PRESS) -

Los grupos ecologistas celebran la salida de Elena Espinosa como ministra de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino porque, en su opinión, "no ejercía de ministra de Medio Ambiente" ni ha sabido trasladar la importancia de este ámbito a todas las políticas del Gobierno de manera transversal, al tiempo que consideran que con Rosa Aguilar se abre una "nueva etapa y esperanza" para lo que le piden que "se ponga las pilas".

Así, en declaraciones a Europa Press, el coordinador estatal de Ecologistas en Acción, Luis González, Espinosa "ha tenido una política nefasta" desde sus "no acciones" en políticas de cambio climático y en protección de la biodiversidad que, en su opinión, "deja mucho que desear, hasta el punto que se ha retrocedido". Por este motivo, ha subrayado que los grupos ecologistas llevaban mucho tiempo pidiendo su dimisión, hasta que "finalmente ha sido relevada en su cargo".

En cuanto a la nueva titular del MARM, Rosa Aguilar, considera que ésta "no tiene crédito", ya que el Ejecutivo lleva "mucho tiempo demostrando que no tiene políticas medioambientales reales", por lo que exige que el relevo vaya "acompañado de políticas reales desde ya".

"Tiene una buena oportunidad que no solo es un cambio de persona sino de políticas", ha apostillado González, que reconoce que mira "con escepticismo" el nombramiento de Aguilar a la que acusa de haber basado su gestión al frente de la alcaldía de Córdoba en la especulación urbanística y, como consejera de Transportes de la Junta de Andalucía "tampoco" han visto "claro" que piense en políticas de movilidad sostenible, dejando de construir infraestructuras o reduciendo los tráficos diarios.

Por su parte, la portavoz de Amigos de la Tierra, Liliane Spendeler, ha manifestado que la salida de Elena Espinosa "solo puede ser positiva porque nunca ha tenido la capacidad de asumir la importancia de medio ambiente en deferencia de las otras responsabilidades", ni ha transmitido el medio ambiente al resto del Ejecutivo. Además, ha lamentado la falta de acción en materias como cambio climático o protección de la biodiversidad en su ministerio, ni ha sido "capaz de frenar los componentes negativos para el medio ambiente desde otros departamentos como Fomento o Industria".

ETAPA ESPERANZADORA

Con respecto a la nueva titular, ha expresado que "se abre una nueva etapa esperanzadora" aunque "habrá que ver cómo se maneja". En ese sentido, ha aprovechado para demandar al Gobierno un "cambio en su conjunto" y a Aguilar "un cambio de rumbo muy, muy, importante", en favor del medio ambiente.

Mientras, el director ejecutivo de Oceana Europa, Xavier Pastor, espera que el nombramiento se traduzca en un "avance" hacia una nueva política pesquera y de conservación marina de España, que garantice el cumplimiento de los acuerdos y compromisos internacionales adoptados.

En ese sentido, ha recalcado que Rosa Aguilar se incorpora al cargo en un "momento crucial" para las pesquerías europeas, coincidiendo con el proceso de elaboración de una nueva Política Pesquera Comunitaria para la gestión de unos recursos pesqueros "sobre explotados o agotados".

Por este motivo, confía en que la nueva titular del MARM sea "consciente de la situación dramática" que atraviesan los océanos y actúe "en consecuencia", garantizando la protección y conservación de la biodiversidad marina como la "única vía de asegurar la viabilidad económica del sector pesquero a largo plazo".

Por otro lado, el director de WWF España, Juan Carlos del Olmo, se mostrado "expectante" y ha calificado la marcha de Espinosa como "una buena noticia", al tiempo que da la "bienvenida a la nueva ministra" a quien pide cambios importantes en el año y medio que le queda y tiene que reorientar las políticas hacia otras "más sostenibles".

Asimismo, ha valorado que se trata de un cambio "interesante" que espera que contribuya a cambiar sobre todo agricultura, pesca, a dar una mayor relevancia a las políticas medioambientales, no solo de este departamento sino también en aspectos como energía o infraestructuras. En todo caso, espera que no solo se trate de un "cambio de imagen" para año y medio sino que el cambio en las políticas se haga "realidad".

CAMBIO "IMPRESCINDIBLE"

En la misma línea, el director ejecutivo de SEO/Birdlife, Alejandro Sánchez, ha puntualizado que da por "bienvenido un cambio que era imprescindible" porque Espinosa era "un obstáculo a cualquier política medioambiental" y, en cuanto a Rosa Aguilar, piensa que es un cambio "bueno" ya que le atribuye sensibilidad social, por lo que espera que la relación con los ecologistas "cambie a mejor".

Igualmente, ha insistido en que Aguilar tiene "un perfil más alto que le va a dar más visión al medio ambiente y al Ministerio" pero le ha recordado que en año y medio tiene "muchas cosas pendientes", como la Cumbre de Biodiversidad de Nagoya (Japón), la Cumbre de Cambio Climático de Cancún (México) y le pide que de un "giro a los presupuestos para que pueda existir cierto margen de maniobra para el medio ambiente". "Le pedimos que se ponga las pilas y a trabajar cuanto antes, porque año y medio se pasa muy rápido y hay muchos temas", ha solicitado.

Por último, el director ejecutivo interino de Greenpeace, Mario Rodríguez, estima que se trata de "la mejor noticia en términos de política ambiental", al considerar que Espinosa "ha dejado bajo mínimos la política ambiental". "En estos dos años largos el medio ambiente ha quedado reducido a nada en la mesa del Consejo de Ministros", ha lamentado, por lo que tilda de "necesaria y largamente solicitada" su salida.

En cuanto a Rosa Aguilar, opina que tiene una "labor difícil" al frente del MARM, sobre todo porque los presupuestos han reducido a la marginalidad las políticas medioambientales y le gustaría que también hubiera salido del Ejecutivo el ministro de Industria, Turismo y Comercio, Miguel Sebastián. En ese contexto, le pide a Aguilar, "para que no sea solo una acción de maquillaje", una política de "gestos" que, a su juicio, se traduciría en demoler el hotel El Algarrobico (Almería) o sumándose a los países de la UE que piden reducir un 30 por ciento las emisiones de CO2 de forma unilateral.