Actualizado 23/05/2013 10:49

RSF expresa su "alarma" por la frecuencia con la que el Gobierno de Obama abre casos por filtraciones

MADRID, 23 May. (EUROPA PRESS) -

La organización Reporteros Sin Fronteras (RSF) ha expresado este miércoles su "alarma" por la frecuencia con la que el Gobierno del presidente estadounidense, Barack Obama, ha abierto casos por filtraciones en base al Acta de Espionaje, aprobada en 1917.

"Seis informantes han sido procesados bajo esta legislación desde la llegada de Obama al poder en 2009. Previamente, el Acta de Espionaje había sido utilizada en tres ocasiones en respuesta a filtraciones: en 1973, en 1985 y en 2005", ha indicado.

"Estas cazas de brujas violan los principios de la Primera Enmienda impactando directamente en el trabajo de los periodistas, que son considerados sospechosos de poner en peligro la seguridad del país cuando, de hecho, solo están haciendo lo que requiere su trabajo", ha agregado RSF.

En este sentido, ha recalcado que, pese a que Obama ha resaltado no creer que los periodistas deban ser perseguidos por hacer su trabajo, "existe una contradicción entre querer promover un escudo federal para proteger la confidencialidad de las fuentes y la paranoia conspirativa que lleva a las autoridades federales a espiar a los periodistas para identificar sus fuentes".

Asimismo, ha apuntado que cuatro de los seis procesos se iniciaron en 2010 y ha citado como el más importante el caso contra el soldado del Ejército estadounidense Bradley Manning, acusado de haber filtrado miles de documentos confidenciales al portal Wikileaks.

El último caso, abierto en 2012, finalizó con la sentencia a 30 meses de cárcel contra el exagente de la CIA John Kiriakou por revelar detalles sobre los métodos de tortura utilizados por la CIA para interrogar a sospechosos de terrorismo.

"El público estadounidense tiene derecho a saber cómo actúan los empleados federales en situaciones en las que el respeto a los Derechos Humanos está en el foco", ha valorado RSF.

Apenas días después de la publicación de informaciones sobre la obtención por parte del Departamento de Justicia de los registros de llamadas entrantes y salientes de más de 20 líneas asignadas a la agencia de noticias AP y a sus reporteros, el diario 'The Washington Post' reveló que el corresponsal jefe de Fox News en Washington, James Rosen, había sido investigado en un caso de espionaje.

En este caso, el FBI obtuvo los registros telefónicos de Rosen, entró en su correo electrónico y extrajo información sobre sus movimientos del Departamento de Estado para trazar la fuente de una filtración.