Actualizado 08/11/2010 12:28

El Servicio para Refugiados de los Jesuitas ha protegido en su historia los derechos humanos de medio millón de personas

Tres refugiados en África
IVE

Indica que ha educado, cada año, a 280.000 niños, jóvenes y adultos en todo el mundo


MADRID, 8 Nov. (EUROPA PRESS) -

El Servicio para Refugiados de los Jesuitas (JRS, por sus siglas en inglés) ha protegido en sus treinta años de historia los derechos humanos de más de medio millón de personas, más de la mitad mujeres, "desplazadas por la fuerza en todo el mundo", además de ofrecerles educación, asistencia de emergencia y servicios sanitarios.

Así, esta organización jesuita --creada el 14 de noviembre de 1980 para responder a las necesidades humanitarias y educativas de los 'boat people' vietnamitas--, denuncia que el número de desplazados "ha ascendido de los 16 a los 45 millones de personas". También critica que "detrás del desplazamiento moderno está la codicia que aviva la inseguridad y ensancha las diferencias económicas".

Además, señala que desde su fundación, por parte del ex superior general de la Compañía de Jesús, el Padre Arrupe SJ, la organización "ha aumentado el nivel de alcance de sus servicios". En este sentido, el Padre Arrupe ha comentado que el lugar de los jesuitas "está junto a los refugiados en los campamentos, en las zonas de conflicto y en los márgenes de la sociedad".

"Esta cercanía nos muestra la mejor manera de atender a los refugiados y de defender, en su nombre, sus derechos, promover la justicia y la reconciliación", ha explicado, por su parte, el director del JRS Internacional, Peter Balleis SJ.

280.000 NIÑOS, JÓVENES Y ADULTOS EDUCADOS AL AÑO

Asimismo, la organización humanitaria (formada por el JRS, el Centro Astalli y Magis y que tiene proyectos en 51 países) indica que ha ofrecido educación primaria, secundaria y superior, así como formación profesional, a 280.000 niños, jóvenes y adultos de todo el mundo cada año ya que, según afirma, tiene como "prioridad máxima" asegurar un futuro para los refugiados, en particular, invirtiendo en educación y formación.

"A lo largo de estos 30 años el JRS se ha mantenido fiel a su misión: ir donde la necesidad sea mayor y marcharse sólo cuando los retos de los refugiados hayan sido resueltos", concreta la organización. En este sentido, indica que realiza esta labor "trabajando estrechamente con los refugiados y en colaboración con toda la gente de buena voluntad".

El JRS añade que es una organización "abierta a gente de todas las tradiciones que quieran compartir y ayudar en su misión", así como que sin la cercanía a los refugiados, su labor en los centros de poder --Ginebra, Roma, Bruselas o Washington-- "no sería posible".

Por último, señala que, con motivo de la celebración de sus 30 años de historia, tendrán lugar en Roma (Italia) la conferencia 'El mundo movilizado. La respuesta de los jesuitas a los refugiados', en la Universidad Gregoriana, así como una misa en la Iglesia de Gesú, seguida de un concierto de los músicos de la orquesta 'Los sonidos de la Tierra'.

Estos músicos, según concreta JRS, son un total de 40 jóvenes de comunidades marginales, "algunos de ellos desplazados forzosos", e interpretarán piezas modernas y tradicionales de África, Asia, América Latina y Europa.