Actualizado 09/12/2009 14:18

Las agencias humanitarias advierten de las dificultades de los desplazados que vuelven a sus hogares en Pakistán

MADRID, 9 Dic. (EUROPA PRESS) -

Decenas de miles de desplazados internos en el noroeste de Pakistán que han regresado a sus hogares después de pasar los últimos meses en campamentos se están encontrando con numerosas dificultades para regresar a su vida anterior, a pesar de que una parte de la ayuda ya comienza a llegar hasta ellos, según manifestaron este miércoles diversas agencias humanitarias.

Los desplazados en los distritos de la Provincia de la Frontera del Noroeste (NWFP) se han visto especialmente afectados. Más de dos millones de personas se vieron desplazadas por los enfrentamientos entre el Ejército y los insurgentes talibán en el valle del Swat y en los distritos adyacentes a partir de mayo de este año, aunque muchos regresaron desde julio.

Después de meses como desplazados, muchos regresan para encontrar que su ganado está muerto o ha sido robado. Sin embargo, las mujeres que ahora se ocupan por completo de sus hogares se enfrentan a la peor parte. "Mi marido murió en el enfrentamiento, y mi suegro murió de un ataque al corazón el mes pasado. Ahora estoy sola con mis hijos y mi suegra", aseguró Farhat Bibi, quien señaló que, por el momento, son sus vecinos quienes los ayudan.

Varias agencias internacionales han intentado asistir a estas cabezas de familia y a otros grupos vulnerables. Durante el pasado mes de noviembre, la Organización de Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO) junto con la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AECID), comenzaron a identificar a los beneficiarios de la distribución de diferentes suministros.

"Tenemos cuatro proyectos diferentes para los distritos de Buner, Dir, Shangla y Swat que alcanzarán a 125.000 personas. Hemos distribuido suministros para que se pueda llevar a cabo la siembra en las estaciones de invierno y verano, entre ellos semillas y fertilizantes para los hogares que más lo necesitan", indicó el director de programas para este país de la FAO, Jahangir Jan.

Por otro lado, el Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) ha comenzado a desarrollar la primera fase de un programa de asistencia agrícola para que 45.000 familias vuelvan a sembrar en las zonas más afectadas por el conflicto.

"El trigo y las herramientas recibidas son importantes porque siempre hemos sido agricultores, y no tenemos otra forma de sobrevivir", indicó un residente de Swat, Gulshan Jan, quien añadió que su pequeño terreno había resultado "muy dañado" en el enfrentamiento y que era "difícil volver a hacerlo productivo".

Por otro lado, el ministro de Información de la NWFP, Mian Iftijar Husai, declaró que se está haciendo "todo lo posible para ayudar a la gente que está en la zona de conflicto pueda volver a su vida normal".

De acuerdo con la actualización que la Oficina de Naciones Unidas para la Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA) publicó el pasado 27 de noviembre, Pakistán aún tiene 1,3 millones de desplazados internos, 1,66 millones de desplazados han regresado ya a sus lugares de origen y aún hay unos 110.000 en once campamentos.