TOKIO, 1 Mar. (EUROPA PRESS) -
El portavoz del Gobierno japonés, Hirofumi Hirano, ha anunciado 3 millones de dólares (2,2 millones de euros) en ayuda de emergencia para los afectados por el fuerte terremoto que sacudió en la madrugada del sábado la costa centro-sur de Chile y que ha causado más de 700 muertos.
La Agencia de Cooperación Internacional Japonesa (JICA) ha dispuesto además para su envío materiales de emergencia valorados en 30 millones de yenes (unos 250.000 euros) que incluyen tiendas de campaña, purificadoras de agua y generadores de electricidad que se encuentran ya almacenados en Miami (Florida, Estados Unidos), informó este lunes la agencia de noticias japonesa Kiodo.
También se encuentra preparado un equipo médico formado por un funcionario del Ministerio de Asuntos Exteriores, y dos integrantes de la JICA que partirá en la tarde de este lunes desde Tokio con destino a Chile, informó el Ministerio de Asuntos Exteriores.
"El Ministerio de Asuntos Exteriores ha decidido enviar un equipo médico de emergencia como primer paso", afirmó en la mañana de este lunes el primer ministro japonés, Yukio Hatoyama, en declaraciones a los medios de comunicación.
Este equipo podría incrementar sus integrantes hasta los 20 miembros en función de las evaluaciones que se remitan desde la zona, explicó un portavoz del Gobierno. Un enviado del Ministerio de Defensa nipón también viajará a Chile para estudiar la situación.
En cualquier caso, posteriormente se podrían adoptar más medidas de respuesta en función de un eventual requerimiento formal del gobierno de la presidenta chilena, Michelle Bachelet. "Japón desempeñará el papel que deba en la reconstrucción y en segundos y terceros pasos", afirmó Hatoyama, que confirmó además que no hay que lamentar víctimas mortales por el tsunami que golpeó las costas de Japón, provocado por el seísmo de Chile. "Creo que fuimos capaces de actuar rápidamente ante el tsunami", dijo, aunque reconoció que aún resta evaluar los posibles daños causados al sector pesquero.
Por su parte, Hirano lamentó que parte de la población desoyera los avisos de alerta y permaneciera en sus viviendas pese al riesgo de tsunami. "Es lamentable. No logramos que la totalidad de la población comprendiera el riesgo de tsunami. Evaluaremos la labor de las autoridades locales al respecto", dijo.
En la tarde del domingo olas de hasta 1,45 metros llegaron a las costas orientales de Japón, especialmente en la prefectura de Iwate, en el norte de la principal isla del archipiélago japonés, Honshu.
