LONDRES, 9 Jun. (EUROPA PRESS) -
Los extranjeros que casarse con un ciudadano británico tendrán que someterse a un examen de inglés antes de conseguir un visado de matrimonio para entrar en Reino Unido, según una nueva medida del Gobierno británico.
La nueva norma entrará en vigor el próximo otoño y significará que los ciudadanos no comunitarios, no pertenecientes a la Unión Europea, que quieran un visado por matrimonio deberán ser capaces de hablar inglés al nivel de un niño de 5 o 6 años. Mientras que los trabajadores cualificados, que ya saben hablar y entender al nivel anteriormente indicado, quizás necesiten alcanzar un nivel más alto de inglés.
La ministra británica de Interior, Theresa May, aseguró que "ser capaz de hablar en inglés debe ser un requisito previo para alguien que quiere residir aquí. El nuevo requisito para los cónyuges ayudará a promover la integración, eliminará las barreras culturales y protegerá a los servicios públicos", indicó el diario británico 'The Times'.
El examen de lengua inglesa se aplicará al año a 38.000 cónyuges, a uniones por lo civil y prometidos, entre los que se incluyen a muchos ciudadanos indios, bangladesíes y paquistaníes que llegan a Reino Unido para contraer matrimonio. Las autoridades creen que el número de visados de residencia por matrimonio se reducirá a 6.000 al año.
La nueva prueba se aplicará a los cónyuges o parejas civiles, a novios o uniones civiles, a parejas de hecho o parejas del mismo sexo entre un británico o residente permanente. El nuevo Gobierno británico indicó también que las nuevas pruebas para aquellos que buscan un visado de matrimonio se dificultarán en los próximos años.
Las pruebas serán proporcionados en el extranjero en los centros acreditados por la Agencia de Fronteras del Reino Unido. El Ministerio del Interior dijo que pensaba que los inmigrantes tendrían que cursar entre 40 y 50 horas de clase para cumplir con el nivel requerido y podrán repetir el examen hasta que consigan aprobarlo.
