SEVILLA, 10 Feb. (EUROPA PRESS) -
La consejera para la Igualdad y el Bienestar Social de la Junta de Andalucía, Micaela Navarro, insistió hoy de nuevo en que la residencia 'Aurora' cumplía "con todo lo que tiene que ver con la seguridad y con todos los elementos esenciales para que una residencia esté en funcionamiento", si bien aclaró que lo único que tenía que "aplicar" de cara a una inspección que tenía el próximo mes de marzo era "el plan de autoprotección" que exige la normativa estatal de 2007.
Según explicó la consejera a los medios de comunicación antes de comparecer en la Comisión de Igualdad y Bienestar Social en el Parlamento de Andalucía, la residencia 'Aurora' fue inspeccionada el pasado mes de septiembre de 2009 y, en dicha evaluación, se advirtió de que aún no había puesto en práctica "los planes de autoprotección de los que habla la normativa estatal del año 2007 y que tenía que aplicar porque tenía de nuevo una inspección en marzo para verificar que se estaba llevando a cabo".
Los planes de autoprotección, no obstante, tal y como indicó la consejera, no son "ni los planes de emergencia ni los planes de evacuación, que con esos sí que cumplía por ley la residencia", sino que se trata, ejemplificó Navarro, "de planes que, entre otras cosas, hablan de dar formación a los profesionales para que, en unas circunstancias como éstas, sepan cómo actuar desde el primer momento y con las dificultades que ello conlleva".
Alguna de estas dificultades, en el caso concreto de la residencia 'Aurora', fue, según reconoció Navarro, "la falta de movilidad de algunos mayores", pero quiso dejar claro que no es el caso de las rejas de las ventanas, sobre las que aseguró que "pueden ser un obstáculo en un hecho puntual como éste, pero es una salvaguarda de seguridad en la inmensa mayoría de los casos".
También se refirió la consejera a la ratio de técnicos profesionales exigida por cada mayor en las residencia españolas y volvió a insistir en que el centro de la tercera edad 'Aurora' "cumplía tanto la normativa estatal como la autonómica, que es aún más estricta que la nacional".
"Tenía autorización para 24 plazas y había 19 residentes en ese momento en la residencia, y no todos ellos eran personas no válidas, por lo que se cumplía la ratio de personal que exigen la normativa estatal y la autonómica", recalcó Navarro.
Respecto a los residentes aún ingresados en el hospital, la consejera aseguró que, conforme vayan siendo dados de alta, "serán realojados en las distintas residencias que tenemos en la provincia de Sevilla y en Sevilla capital".
