ALMERÍA, 2 Jun. (EUROPA PRESS) -
El jurado popular declaró hoy a Alfonso O.E. como único culpable del asesinato en 2006 de su ex cuñada María Dolores P.F. tras una deliberación de más de diez horas en el proceso en el que también se enjuiciaba a José Antonio P.F., contra quien no han encontrado pruebas suficientes para desvirtuar su presunción de inocencia.
Fuentes judiciales precisaron a Europa Press que el veredicto de culpabilidad, adoptado por unanimidad de todos los miembros, se ha basado en la primera declaración que prestó Alfonso O.E. ante la Guardia Civil y en la que reconoció haber degollado a la víctima y haber actuado en solitario. El testimonio prestado por la hija de 12 años de María Dolores P.F. también ha sido determinante para exculpar al primo segundo de su madre.
El jurado popular, que se vio obligado a emplazar a hoy la emisión de su decisión por defectos de forma en la reacción, tuvo en cuenta que la pequeña, quien fue sometida a exploración judicial durante la quinta sesión de la vista, identificó en todo momento a su "tito" como la persona a la que vio entrar en la casa en la madrugada del 27 de septiembre de 2006 pero incurrió en numerosas contradicciones al referirse a la persona que le acompañaba.
El veredicto, tras el que la acusación particular se adhirió a la petición fiscal de 16 años de prisión, desestimó de acuerdo a la pericial forense que, tal y como solicitó la defensa de Alfonso O.E., éste actuase trastornado por intoxicación etílica y por consumo de cocaína. Rechazó, asimismo, que concurriese en su caso la atenuante de confesión ya que declaró los hechos ante la Guardia Civil una vez detenido.
En el trámite de informes la fiscal mantuvo la acusación contra José Antonio P.F., contra el que, según reconoció, las evidencias eran más "débiles" debido a que, hasta que fue inculpado por el otro acusado, "tuvo cerca de cinco días para lavar la ropa y borrar indicios". Aludió, no obstante, a que la hija de la víctima se refirió implícitamente a él a hablar de "un primo segundo con los dientes grandes que había ido días antes a casa a recoger unos perros".
Durante la primera sesión del juicio, Alfonso O.E., en prisión provisional, alegó que el marido de la víctima le "tendió una trampa" después de que le descubriese a ella que le era supuestamente infiel. En su declaración ante la Guardia Civil dijo, sin embargo, haber sido el autor de la muerte de su cuñada.
José Antonio P.F. sostuvo, sin embargo, que dejó al otro acusado para regresar a su casa a las 03,30 horas, un extremo que corroboró en acto de juicio su padre y que su defensa apuntaló al documentar una llamada que se realizó media hora antes desde una cabina telefónica ubicada a apenas 100 metros de su domicilio.
María Dolores P.F., de 35 años, falleció en la madrugada del 27 de septiembre de 2006, degollada con un cuchillo de cocina de 18 centímetros de hoja después de que le propinarán una paliza en la cocina de la vivienda en la que residía, ubicada en la calle Los Manchos de Pulpí, a la que el culpable había ido a pedir dinero para poder adquirir cocaína.
