Actualizado 22/04/2010 09:54

Muchos países han aplicado estrategias para reducir sus emisiones después de Copenhague, según un informe

MADRID, 22 Abr. (EUROPA PRESS) -

Un tercio de los 95 países analizados en el Índice de Competitividad Climática (ICC) 2010 han aplicado estrategias para reducir el dióxido de carbono que generan sus actividades económicas con posterioridad a la consecución del Acuerdo de Copenhague, alcanzado en la cumbre sobre el cambio climático que se celebró en la capital danesa el pasado diciembre.

Este estudio valora los progresos que han hecho 95 países --responsables del 97 por ciento de la actividad económica mundial y del 96 por ciento de las emisiones de CO2-- en cuanto a la creación de puestos de trabajo y la promoción del crecimiento económico mientras se respeta el medio ambiente.

La conclusión es que a pesar de la incertidumbre que ha caracterizado a las negociaciones internacionales sobre el cambio climático, muchos países han aplicado estrategias económicas ecológicas durante el primer trimestre de 2010.

El ICC, elaborado por el instituto independiente y sin ánimo de lucro AccountAbility en colaboración con el Programa de Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA), analiza tanto la "Responsabilidad Climática" como la "Actuación Climática", es decir, que determina si un país tiene una estrategia climática clara, ambiciosa y que cuente con apoyos, pero también si la está aplicando.

MEJORAS DESDE COPENHAGUE

Según el informe, desde la cumbre de Copenhague el 46 por ciento de los países han mejorado su responsabilidad climática. Un total de 32, especialmente Alemania, China y Corea del Sur, han hecho mejoras importantes, y también India, Indonesia, Kenia, México, Filipinas y Ruanda han avanzado en este aspecto.

El director ejecutivo de AccountAbility, Alex MacGillivray, afirmó que "los países, a todos los niveles de desarrollo, pueden desarrollar un liderazgo político e instituciones fuertes y dialogar con los interesados para desarrollar una competitividad climática", que "ya no son sólo palabras", sino que constituye una "frontera económica real, sólida y dinámica".

Suecia, Dinamarca, Alemania, Japón y Francia son los países que han progresado de forma más constante a la hora de combinar la responsabilidad y la actuación climáticas. Suiza y Austria han tenido una buena actuación, mientras que Reino Unido y Estados Unidos destacan por su responsabilidad.

Según el ICC, Corea del Sur, Hong Kong y Malasia están desarrollando estrategias buenas, y los países del grupo BASIC (Brasil, Sudáfrica, India y China) están aumentando su competitividad climática.

El informe subraya la importancia del sector empresarial, que debe desempeñar un papel activo para promover la competitividad climática. En este sentido, señala que en los países que ocupan una buena posición en el índice hay una gran cantidad de empresas que se esfuerzan por reducir sus emisiones de CO2.

Hee Ryung Lee, analista principal de AccountAbility, dijo que "el estudio demuestra que los países que más han progresado son los que están cultivando los negocios con determinación y esmero como parte de su estrategia para lograr un crecimiento bajo en CO2 que sea duradero".

El ICC asegura que no hay un solo camino para alcanzar la competitividad climática y que cada país aplica una estrategia distinta según sus prioridades y capacidades. Por ejemplo, en Bolvia, Ghana, Vietnam y Bangladesh los ciudadanos están muy concienciados con el problema del cambio climático aunque las empresas no están demasiado comprometidas. En Brasil y Filipinas son sus respectivos gobiernos los que asumen el liderazgo, mientras que en Escandinavia o Singapur las que están a la cabeza son las empresas.