Actualizado 03/03/2010 19:27

Una ONG pide cerrar el orcario de Loro Parque (Tenerife) por las condiciones "precarias" que padecen sus cuatro orcas

SANTA CRUZ DE TENERIFE, 3 Mar. (EUROPA PRESS) -

El Proyecto Gran Simio ha pedido a Loro Parque (Tenerife) que cierre de forma definitiva su orcario, al entender que "no es necesario tener en cautividad y en condiciones precarias a estos colosos de los mares, el más grande de los delfínidos, viviendo en auténticas bañeras".

En una nota de prensa, el director ejecutivo del Proyecto Gran Simio, Pedro Pozas, explicó que esta Asociación ya ha realizado diversas denuncias a diferentes delfinarios de España por creer que "incumplen la Ley 31/03, de Conservación de la Fauna Silvestre en los Parques Zoológicos, y por ejercer un maltrato físico en los animales al no tener una alimentación adecuada a su especie y psíquico por la cantidad de sesiones circenses que tienen que realizar diariamente".

Pedro Pozas recordó, además, que el pasado 24 de diciembre un entrenador del Orca Ocean de Loro Parque falleció al ser golpeado por una orca de las cuatro que cuenta este recinto zoológico; dos años antes, otra de las orcas ocasionó en otro incidente heridas de consideración a una de las cuidadoras; y en febrero de este año, una entrenadora murió en el Centro Marino Sea World de Orlando (Florida) al ser atacada por una orca que ya había protagonizado otro incidente con anterioridad.

Para el Proyecto Gran Simio, "estos hechos no deberían de haber pasado; el continuo estrés al que están sometidas las orcas diariamente con estrictos sistemas de entrenamiento y espectáculos hacen que, por un lado, se vuelvan más agresivas, y por otro, encerrar a estos colosos en piscinas reducidas fuera de su hábitat, hace que en algunos momentos no controlen bien sus movimientos y se produzcan accidentes graves".

Pozas aclaró que sólo existen en Europa dos orcarios: uno en Francia con cuatro orcas, Merineland Antibes, y otro en España, Loro Parque, también con cuatro orcas. "El resto de los países europeos han comprendido que este tipo de espectáculos con orcas no es educativo; tampoco responde a un proyecto de conservación, por lo que es meramente un negocio y un espectáculo degradante, en el que el hombre se erige dominante o domador de un ser más poderoso en fuerza que él, para demostrar la supremacía del ser humano", concluyó.