Actualizado 01/06/2010 16:39

O.Próximo.- El padre de Manuel Tapial asegura que su hijo está en una cárcel diferente de los otros dos españoles

Pide una reunión "urgente" con Moratinos y afirma que su hijo "no entró ilegalmente en Israel, fue secuestrado"


MADRID, 1 Jun. (EUROPA PRESS) -

Manuel Espinar, padre del cooperante Manuel Tapial, retenido en un centro de detención israelí tras el ataque de ayer a la flotilla humanitaria que pretendía romper el bloqueo a Gaza, aseguró este jueves que su hijo se encuentra en una cárcel diferente de la de los otros dos españoles y que de momento su familia no ha podido comunicarse con él.

"Manu no está con los otros dos, está en otra cárcel", declaró Espinar en rueda de prensa celebrada en Madrid por la Red de ONG Palestinas y el Grupo de ONG por Palestina. "Los otros sí han podido comunicarse con su familia, pero él no", añadió. La información de que dispone el Ministerio de Asuntos Exteriores y Cooperación es que los tres se encuentran en un centro de detención de Beersheba, al sur de Tel Aviv.

En todo caso, Espinar anunció que, inmediatamente después de la rueda de prensa, solicitaría una reunión "urgente" con el ministro de Asuntos Exteriores y de Cooperación, Miguel Angel Moratinos, ya que no está de acuerdo con algunas de las informaciones que su departamento está ofreciendo sobre la situación de su hijo.

"Están hablando de nosotros sin hablar con nosotros", se quejó Manuel Espinar, presidente de la ONG Cultura, Paz y Solidaridad, quien manifestó su sorpresa por el hecho de que un funcionario del Ministerio le telefoneara para preguntarle por qué su hijo, mayor de edad, se había negado a firmar el acta de deportación, lo que retrasará su repatriación.

Espinar precisó que a su hijo y a otros participantes de la flotilla "se les va a expulsar por entrar ilegalmente en Israel", pero "no han entrado ilegalmente", sino que "han sido secuestrados en aguas internacionales y llevados a los fondos de la piratería israelí".

Tapial permanece detenido en Israel junto a la cooperante Laura Arau y el periodista David Segarra. El ministro consejero de la Embajada española en Tel Aviv, Juan González Barba, se desplazó esta mañana hasta Beesheva para reunirse con ellos e intentar convencerles de que firmen la deportación, lo que les garantizaría una repatriación inmediata a España. En caso contrario, se iniciará un proceso judicial más largo contra ellos que tendría que terminar también en un procedimiento de expulsión, según Exteriores.

"MÁS TEMOR QUE MILES DE QASSAM"

Espinar criticó duramente a las autoridades israelíes y a los medios de comunicación que han vinculado a la flota humanitaria con Hamás. "El Gobierno y los Gobiernos de Europa saben perfectamente qué gente iba en la flota", aseguró. "Sabíamos que esta flota crearía mucho más temor a Israel que miles de cohetes Qassam", prosiguió.

La flota, aseguró, estaba formada por "600 personas de 60 países y llevaba incluso a víctimas del Holocausto, a un premio Nobel de la Paz, a un diputado israelí, a dos diputadas alemanas". "Decir que esa composición tan plural es una flotilla de Hamás es un insulto a la inteligencia", agregó.

En cuanto a las armas que, según Israel, había dentro del barco, Espinar afirmó rotundamente que "las armas de destrucción masiva eran tirachinas, barras y sillas". "La defensa del barco se hizo con sillas, mientras que ellos (los soldados israelíes) atacaron a 90 millas de la costa y bajaron armados, no es casual que hubiera los muertos que ha habido", denunció.