Su representante ante la ONU denuncia la violación de DDHH por parte de Marruecos y cree que España puede jugar un rol en la vuelta a la legalidad
SANTA CRUZ DE TENERIFE, 10 Mar. (EUROPA PRESS) -
El representante del Frente Polisario en Naciones Unidas, Ahmed Bujari, ha planteado hoy que "España debe contribuir desde la paz" en la resolución del conflicto del Sáhara Occidental y planteó que "la esperanza no tiene límites y no queremos que se convierta en una ilusión o quimera".
"Las relaciones con España en contenido y forma no nos permiten decir que la esperanza esté realizada, pero tampoco no ponemos fin a nuestra perseverancia en el rol que juegue a favor de la legalidad internacional en el Sáhara occidental", insistió Bujari, que participa en Tenerife en unas jornadas sobre 'Los Derechos Humanos y el Sáhara Occidental'.
Destacó que se haya reactivado "la preocupación sobre la cuestión de los derechos humanos" y agradeció la sensibilidad de la sociedad española en general ante la reivindicación por la autodeterminación del pueblo saharaui. Incidió en que el conflicto internacional está a 100 kilómetros de Canarias y recordó que se inició hace 35 años. "El pueblo saharaui esperaba la independencia pero se frustró la plena autodeterminación por la invasión marroquí", argumentó.
Bujari detalló que "los últimos esfuerzos de la ONU no han dado los resultados esperados y esperamos una reactivación de la mediación (del enviado personal de Ban Ki Moon, Christopher Ross) que intentará visitar la zona a finales de este mes para redinamizar este proceso".
Según Bujari, la última ronda de conversaciones informales con Rabat en febrero pasado a las afueras de Nueva York supuso una "ocasión perdida porque Marruecos llegó a la ronda de negociación con la promesa formulada de que iba a venir con flexibilidad y discutir la propuesta presentada del Frente Polisario". "Si hubiera respetado el compromiso se hubiera entrado en una fase interesante, pero dio marcha atrás", se lamentó Bujari.
Tildó de "inaceptable" la posición de Marruecos y destacó que, "a pesar de su estrategia de imagen, viola los derechos humanos desde el día que llegó al territorio y la ONU no puede dar la espalda a esta situación", subrayó.
En este sentido, esperó que el Consejo de Seguridad "tome cartas en el asunto" y "proteja y observe lo que pase en los territorios mientras no se resuelva el conflicto". Así, abogó por que se dote a la Misión de Naciones Unidas para el referendo en el Sáhara Occidental (MINURSO) de competencia para vigilar los DDHH y se quejó de que en este asunto no haya avances ante la "rigidez" de Marruecos, siempre apoyada por Francia.
"Queremos una solución rápida, segura, duradera y justa del conflicto", reclamó para concluir que "éste es nuestro deseo". "Queremos una paz sólida, que permita poner fin al calvario", puntualizó al tiempo que mantuvo que se trata de un "conflicto de descolonización y no es un problema interno de Marruecos". Expuso que en un eventual referéndum se debe contemplar la opción de la independencia y asumió que la estrategia de crear una autonomía dentro de Marruecos "ha fracasado".
