Actualizado 20/10/2008 16:06

Prisión a una mujer en Santander que agredió a dos agentes que mediaron en una discusión familiar

SANTANDER, 20 Oct. (EUROPA PRESS) -

El juez del Juzgado de Instrucción número 3 de Santander ha condenado, a ocho meses de prisión, a una mujer que agredió a dos agentes de la Policía Nacional, después de que éstos acudieran al domicilio de la procesada donde se estaba produciendo una discusión familiar.

Según la sentencia, dada a conocer hoy, los hechos por los que ha sido condenada P.F.M. ocurrieron sobre las 2.32 horas de la madrugada del pasado 15 de octubre, cuando una dotación de la Policía Nacional fue comisionada en una vivienda situada en la calle Ruiz de Alda de Santander, donde se estaba produciendo una discusión familiar.

Los agentes indicaron a la acusada que abandonara la indicada casa, lo cual hizo aquélla. Sin embargo, ya en el portal del edificio, la imputada agarró por el cuello a un agente, al que rompió un botón de la camisa. Seguidamente una agente acudió en auxilio de su compañero, instante en que fue agredida por la procesada, quien cayó al suelo junto con la citada policía.

Como consecuencia de las agresiones, la agente sufrió lesiones que sólo precisaron de una asistencia facultativa y cuya previsible duración es de tres días, no impeditivos de sus ocupaciones habituales, mientras el otro policía agredido sufrió lesiones que sólo precisaron de una asistencia facultativa y cuya previsible duración es de siete días, no impeditivos tampoco de sus ocupaciones habituales.

Por estos hechos, la acusada ha sido condenada, por un delito de atentado a agente de la autoridad, a la pena de ocho meses de prisión e inhabilitación del derecho de sufragio pasivo durante el tiempo de la condena, y también ha sido condenada, por dos faltas de lesiones, a la pena, por cada una de ellas, de veintiséis días de multa, con cuota diaria de 6 euros y la responsabilidad subsidiaria de un día de privación de libertad por cada dos cuotas no satisfechas.

Igualmente deberá indemnizar con 90 euros a la agente agredida y con 210 euros al otro policía, así como al Ministerio del Interior en la cantidad que se determinen en ejecución de sentencia por los desperfectos en un uniforme, al tiempo que se le impone el pago de costas procesales.