NUEVA YORK, 17 Sep. (EUROPA PRESS) -
La Alta Comisionada de Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Louise Arbour, aseguró hoy que las violaciones graves a las garantías fundamentales en la región sudanesa de Darfur continúan y sostuvo que el Gobierno del país africano no hace lo suficiente para detener estos atropellos.
En una rueda de prensa en Ginebra, Arbour señaló que la naturaleza y la escala de los abusos a los Derechos Humanos en Darfur no han cambiado pese al compromiso expreso de las autoridades sudanesas de proteger a la población civil.
Asimismo, agregó que el Gobierno de Sudán no ha combatido la impunidad y que aún se niega a cumplir con las órdenes de arresto del Tribunal Penal Internacional contra sospechosos de haber cometido crímenes contra la humanidad. "Por lo que vemos en el terreno, hay muy pocos avances en los esfuerzos nacionales por combatir la cultura de la impunidad, muy pocos avances en materia de acusaciones nacionales en el marco de los Derechos Humanos y muy pocas señales de un cambio de actitud por parte del Gobierno de Sudán", dijo.
La Alta Comisionada explicó que las personas desplazadas siguen siendo objetivo de ataques, además de que la violencia sexual contra las mujeres es sistemática en toda la región.
No obstante, pese a considerar que en el caso de Darfur hay pocas razones para ser optimista, confió en que el despliegue próximo de la fuerza de paz mixta de la ONU y la Unión Africana proteja a los grupos más vulnerables de población.
Darfur ha sufrido cuatro años de violencia entre el Ejército sudanés, los rebeldes y las milicias progubernamentales de los 'janjaweed'. El conflicto ha causado la muerte de más de 200.000 personas y el desplazamiento de al menos dos millones.
