No se creará un órgano específico sino que sus funciones
las asumirán agencias ya existentes
BRUSELAS, 8 Mar. (EUROPA PRESS) -
Los ministros de Empleo y Asuntos Sociales de la UE dieron hoy el primer paso para poner en marcha un Observatorio Europeo sobre Violencia contra las Mujeres, una de las prioridades de la presidencia española. Sin embargo, de momento no se creará un nuevo órgano específico como deseaba España, sino que la tarea de recopilar datos y fijar indicadores comunes sobre este problema la asumirán dos agencias que ya existen: el Instituto Europeo de Igualdad de Género y la Agencia Europea de Derechos Fundamentales.
"Lo más relevante es que todos los Estados miembros se han comprometido, han dicho sí a ese Observatorio contra la Violencia de Género", dijo la ministra de Igualdad, Bibiana Aído, preguntada por si el acuerdo colmaba las aspiraciones de España. Subrayó que este instrumento servirá para que en toda Europa se tenga "un diagnóstico clarísimo de la situación y se conozca la dimensión real del problema" para poder diseñar así "las estrategias para poder combatirlo".
Aído explicó que no ve necesaria "la creación de una nueva estructura" y resaltó que tanto el Instituto de Igualdad de Género como la Agencia de Derechos Fundamentales serían un buen "paraguas" para ubicar el Observatorio.
Por su parte, la vicepresidenta de la Comisión y responsable de Justicia, Viviane Reding, anunció que el Ejecutivo comunitario realizará ahora una evaluación de impacto para determinar "quién va a hacer el trabajo y cuál será su coste". "Lo que es seguro es que lo hará una institución existente", insistió.
Los ministros de Asuntos Sociales, presididos por Aído, aprobaron unas conclusiones en las que piden que se den "los primeros pasos hacia la creación de un Observatorio Europeo sobre Violencia contra las Mujeres, basándose en las estructuras institucionales existentes".
Ello significa que de momento serán el Instituto de Igualdad de Género, con sede en Vilnius, y la Agencia de Derechos Fundamentales, ubicada en Viena, los que empiecen a recopilar estadísticas sobre violencia de género, según explicaron fuentes diplomáticas españolas. El motivo es que la mayoría de los Estados miembros creen que hay que aprovechar al máximo las estructuras existentes y evitar duplicidades. Además, tanto la Comisión como la Eurocámara están realizando una evaluación para racionalizar el gran número de agencias de la UE.
Una vez que las dos agencias comiencen a trabajar en el campo de la violencia contra las mujeres, el Ejecutivo comunitario deberá decidir si se justifica la creación de un Observatorio consagrado específicamente a este problema. Desde el punto de vista español consideran que sí, y "lo antes posible", según explicaron las fuentes, aunque es poco probable que se haga durante el semestre de presidencia española.
También la otra iniciativa estrella promovida por la presidencia española para luchar contra la violencia de género, la orden de protección para las víctimas, ha encallado debido a problemas técnicos y jurídicos, aunque todos los países comparten sus objetivos políticos. El Ejecutivo comunitario ve imposible aprobar la iniciativa durante el semestre español.
La vicepresidenta de la Comisión y responsable de Justicia, Viviane Reding, volvió a agradecer este lunes a España que haya situado la violencia contra las mujeres entre sus prioridades porque a menudo se considera un "tabú". Pero reiteró que la propuesta española necesita "refinarse" porque no tiene en cuenta las diferencias entre los Estados miembros. Reding se ha comprometido a presentar un texto alternativo y se comprometió a presentar una propuesta alternativa a principios de 2011.
Los ministros de Asuntos Sociales se comprometieron además a fomentar la creación de un número de teléfono común y gratuito (en el sistema de marcado 116) que pueda utilizarse en los Estados miembros para ofrecer información y asistencia a las víctimas de violencia de género. Reding se comprometió a crear este número "bastante rápidamente" pero dudó de que los Gobiernos vayan a ser tan diligentes en ponerlo en marcha.
Los Veintisiete pidieron a la Comisión "estudiar la elaboración de instrumentos jurídicos adicionales dirigidos a erradicar la violencia contra las mujeres", basándose en los resultados de un estudio que debe examinar la viabilidad de la armonización de las legislaciones nacionales sobre violencia contra las mujeres y los niños.
En las conclusiones se reclama además poner en marcha protocolos comunes de asistencia en el ámbito sanitario y forense para las víctimas de malos tratos, así como de prestarles una asistencia social integral tanto a ellas como a sus hijos.
También se aboga por una campaña permanente de sensibilización para la ciudadanía europea. "Cuando estamos ante un problema de estas características, lo importante es sacarlo del ámbito privado, lo importante es que todos los ciudadanos y ciudadanas consideremos que es un problema que nos afecta a todos", insistió Aído.
"Es un documento ambicioso, un buen punto de partida", defendió la ministra de Sanidad. "Quiero expresar nuestra satisfacción porque considero que la UE ha estado hoy a la altura de las circunstancias. Hoy hemos dicho 'no' de manera conjunta a la violencia de género, a esta lacra deleznable que afecta a todas las sociedades", afirmó.
Por su parte, la vicepresidenta Reding insistió en que la Comisión "utilizará todos los instrumentos a su disposición, incluyendo los legislativos, para combatir el tráfico de seres humanos, la violencia doméstica y las mutilaciones genitales".
