ZARAGOZA, 16 Abr. (EUROPA PRESS) -
La IV Conferencia ministerial de Integración organizada en Zaragoza por la presidencia española de la UE fue clausuró hoy con una declaración conjunta en la que además de promover la incorporación de la integración como eje transversal en todas las políticas públicas, se anima a los Estados miembros a reforzar las iniciativas locales "invirtiendo en barrios con una elevada concentración" de extranjeros.
En concreto, los responsables de inmigración de los 27 han acordado "reforzar las iniciativas locales y la participación ciudadana, invirtiendo en barrios con una elevada concentración de inmigrantes para crear un sentimiento de pertenencia, puesto que es esencial que los inmigrantes participen en todos los aspectos de la vida social, económica y cultural".
El texto, denominado Declaración de Zaragoza, persigue sentar las bases del nuevo discurso europeo de integración, por eso casi todos los puntos de consenso pivotan en torno a la necesidad de que la Comisión Europea establezca cuanto antes una nueva agenda política sobre el tema que incluya un mecanismos de coordinación para mejorar "el intercambio europeo de conocimientos".
En este sentido, destaca la propuesta de consensuar una serie de indicadores válidos para medir el nivel de integración de los inmigrantes en cada uno de los Estados miembros, y elaborar "unos módulos comunes que puedan utilizarse en el establecimiento de políticas de integración nacionales o locales, incluidos elementos fundamentales como cursos de acogida y clases de lengua".
Además, los responsables europeos en la materia han suscrito promover el lanzamiento de un proyecto piloto para la evaluación de las políticas de integración para poner a prueba estos indicadores, que deberá articular la Comisión Europea.
Por otra parte, la Declaración acuerda "reconocer los aspectos positivos de la inmigración, especialmente en el contexto de la mala coyuntura económica y financiera que atraviesa Europa, y seguir promoviendo fórmulas que ayuden a luchar contra el racismo y la xenofobia y todas las formas de discriminación".
En rueda de prensa, la comisaria europea de Interior, Cecilia Malmström y la secretaria de Estado española de Inmigración y Emigración, Anna Terrón, coincidieron al afirmar que "es muy fácil que los inmigrantes sean la cabeza de turco" en crisis económica, por lo que conviene "desarrollar más a fondo la idea esencial de la integración como motor de desarrollo y cohesión social".
En materia de participación ciudadana, el texto apuesta por involucrar a la sociedad civil "reconociendo su papel activo en el proceso bidireccional de interacción mutua por parte de todos los inmigrantes y ciudadanos de los Estados miembros" y concluye la conveniencia de crear redes de intercambio con las asociaciones.
El documento ha sido suscrito por los responsables ministeriales en materia de inmigración de los 27 países miembros de la Unión Europea, a excepción de Suecia, Irlanda y Bélgica, cuyos titulares no pudieron desplazarse hasta Zaragoza para participar en la cumbre debido a los problemas en el espacio aéreo europeo a causa del volcán que entró en erupción el miércoles en Islandia.
