CÓRDOBA, 26 Mar. (EUROPA PRESS) -
Vistalegre Impresores, empresa referente en el sector de las artes gráficas del Sur de España, ha calculado su contribución al cambio climático, la denominada 'Huella de Carbono', en el marco de su política de Responsabilidad Social Empresarial (RSE) y mejora continua, convirtiéndose así en la primera imprenta andaluza en llevar a cabo dicha iniciativa.
Según ha informado EcoAvantis, el cálculo, llevado a cabo por dicha consultora cordobesa, se ha desarrollado siguiendo el Estándar Corporativo de Cálculo y Reporte 'GHG Protocol', de reconocido prestigio a nivel internacional.
De acuerdo con esta norma, se han incluido en el estudio, no solo las emisiones directas, sino que, de forma voluntaria, se han calculado las emisiones indirectas, que no dependen de la entidad. De esta manera, se han tenido en cuenta una gran cantidad de variables, como el desplazamiento de trabajadores, el consumo de materias primas, e incluso la disposición de residuos. La idea, según ha explicado el director de Marketing, Tomás de Haro, "es reflejar la huella de carbono de la forma más real posible".
Los datos obtenidos servirán, a su vez, para dar de alta a Vistalegre Impresores en los registros de la Plataforma Ecoedición, un sistema que La Junta de Andalucía prevé usar para evaluar determinados parámetros ambientales entre los proveedores de artes gráficas y usarlos como criterios de compra pública verde.
El proyecto se ha completado con un plan de reducción de emisiones centrado en los puntos críticos detectados, que incluirá actuaciones como la implementación de mejoras en la movilidad de trabajadores y en la cadena de suministro, que pretenden reducir las emisiones de la entidad en un diez por ciento durante el próximo ejercicio.
Según de Haro, el proyecto ha supuesto una doble oportunidad de mejora, debido a la diferenciación en el sector de cara a los clientes más exigentes en materia medioambiental y al ahorro de costes de explotación, tras la implementación de las mejoras.
El proyecto viene a integrarse en la política de Responsabilidad Social Corporativa (RSC) de la empresa, que reconoce el cambio climático como uno de los principales retos medioambientales de la humanidad para el presente siglo.
