MADRID, 28 Feb. (EUROPA PRESS) -
Greenpeace dijo hoy que no denunciará a las marcas que venden productos no etiquetados, "porque es muy difícil que una ONG pueda enfrentarse a la industria agroindustrial mundial". Así lo aseguró el responsable de la campaña de transgénicos, Juan Felipe Carrasco, en la presentación de la cuarta edición de la guía roja y verde de alimentos transgénicos, en la que se menciona a 35 productos que incurren en esta falta.
El ecologista explicó que, en todo caso, la organización tendría que denunciar a todas las marcas que utilizan transgénicos y no sólo a las que no lo anuncian, porque el hecho de etiquetarlos no implica que dejen de ser una agresión contra la salud y el medio ambiente.
La actual legislación europea de etiquetado obliga a etiquetar los productos que deriven de cosechas transgénicas, "independientemente de la presencia de ADN o de proteína 'transgénica' en el producto final", según el texto. Para Greenpeace, el Gobierno debe encargarse de hacer el seguimiento de estas cosechas. "Nosotros sólo podemos solicitar a los productores y distribuidores de alimentos información sobre su política de utilización de ingredientes transgénicos o sus derivados", afirmó el representante.
En cuanto a la guía, ésta contiene los resultados de análisis de laboratorio en determinados productos, el seguimiento fotográfico del etiquetado y nuevas secciones como los alimentos dietéticos y las pastas. En lista verde están aquellos alimentos de los cuales Greenpeace recibió garantías de que no tienen transgénicos de parte de los fabricantes, y en la roja, los que arrojaron resultados positivos y aquellos cuyo fabricante no garantiza la ausencia de transgénicos.
Según datos de la organización ecologista, España recibe seis millones de toneladas anuales de materias primas transgénicas y el Gobierno permite que se sigan cultivando unas 750.000 hectáreas de maíz transgénico. "Hace una semana, el Gobierno apoyó en la UE la aprobación de una peligrosa patata transgénica", denunció Juan Felipe Carrasco.
Los Organismos Modificados Genéticamente (OMG) o transgénicos son organismos vivos que han sido creados artificialmente, manipulando sus genes. Su cultivo supone el incremento de uso de tóxicos en la agricultura, contaminación genética y de suelo, pérdida de biodiversidad, desarrollo de resistencias de insectos, riesgos sanitarios y efectos no deseados irreversibles en los seres vivos.
