MADRID, 15 Jul. (EUROPA PRESS) -
Los fabricantes de refrescos han reiterado este jueves su compromiso de que la presencia de sus máquinas expendedoras en los centros escolares siga siendo "insignificante", pese a asegurar que estos productos "no son la causa de la obesidad, ya que sólo representan en torno al 1% del total de las calorías diarias que ingieren los niños y adolescentes españoles".
La Asociación Nacional de Fabricantes de Bebidas Refrescantes Analcohólicas (ANFABRA) insiste en un comunicado que "el consumo de refrescos no es representativo en el global de la dieta" de los menores y para avalarlo se remite a diversos trabajos, como el Estudio AVENA (Alimentación y Valoración del Estado Nutricional en Adolescentes) elaborado por el Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC). Este estudio realizado sobre 1.523 adolescentes españoles de entre 13 y 18 años, concluye que "los consumidores de bebidas azucaradas presentan un Índice de Masa Corporal (IMC) similar a los no consumidores".
Además, señalan que este sector ha sido "pionero en adoptar políticas voluntarias para autorregular sus acciones y comunicaciones dirigidas a niños y adolescentes" y colabora activamente con el Ministerio de Sanidad y Política Social en las iniciativas que éste promueve, como la Estrategia NAOS, para educar en nutrición y actividad física y prevenir la obesidad, y el Código PAOS, que regula la publicidad de alimentos dirigida a menores.
