BRUSELAS, 12 Abr. (EUROPA PRESS) -
El Parlamento Europeo pedirá que los vuelos oficiales gubernamentales o los que transportan a las familias reales de la UE se incluyan también en el sistema comunitario de comercio de emisiones de CO2, es decir, que se les fije un tope de permisos de contaminación para que contribuyan a la lucha contra el cambio climático.
El ponente de la Eurocámara para la directiva que incluirá a la aviación civil en el mercado de emisiones, el democristiano alemán Peter Liese, explicó este jueves que la propuesta de la Comisión "estipula que los vuelos reservados a las familias reales o a miembros de los Gobiernos estén excluidos de este régimen de permisos de emisiones".
A su juicio, ello "contradice las afirmaciones de los políticos que dicen que desean comportarse de manera ejemplar". Por este motivo, anunció que propondrá que se suprima esta excepción. "Creo que el Parlamento estará de acuerdo conmigo", auguró.
El ponente indicó además que la Eurocámara propondrá una fecha única, que no quiso concretar pero que aseguró que será antes de 2013, para la entrada en vigor de la norma con el objetivo de evitar distorsiones de competencia entre las aerolíneas europeas y las de países terceros.
El Ejecutivo comunitario ha fijado dos plazos diferentes tras las quejas presentadas por Estados Unidos y otros países, de manera que los vuelos intracomunitarios entrarían en el comercio de emisiones a partir de 2011 y aquellos con salida o destino fuera de la UE un año más tarde, en 2012. La mayoría de Estados miembros defiende también una fecha única, entre ellos España, que pide que ésta sea 2013.
La Eurocámara respaldará la propuesta de Bruselas de crear un sistema armonizado a escala de la UE para repartir los permisos entre las aerolíneas, pero pedirá aumentar la proporción de permisos que se adjudican mediante subastas, que la Comisión ha limitado a únicamente el 3%. Liese explicó que propondrá "alguna cifra entre el 3% y el 100%".
El ponente anunció además su intención de imponer un tope de permisos de emisión para las aerolíneas más estricto del que prevé el Ejecutivo comunitario, basado en el 100% de las emisiones medias entre 2004 y 2006, aunque no dio ninguna cifra. Liese presentará sus propuestas definitivas antes del verano y avanzó que el voto final de la Eurocámara no tendrá lugar hasta el mes de noviembre.
