MADRID, 31 Mar. (EUROPA PRESS) -
AENA y MMC Automóviles España (MMCE), importador oficial de Mitsubishi Motors en España, han llevado a cabo una prueba piloto con dos vehículos eléctricos i-MiEV en el aeropuerto de Madrid-Barajas, con el objetivo de evaluar las aportaciones del uso de esta nueva tecnología en las actividades habituales de la infraestructura y en su entorno, para iniciar un estudio de viabilidad sobre su uso.
Según informó AENA, el periodo de prueba ha sido "satisfactorio" y los datos obtenidos son positivos para futuros planteamientos de flotas piloto en los aeropuertos de la red de AENA.
La experiencia, que se inició el pasado 15 de marzo y que se prolongó durante dos semanas, confirma el compromiso del gestor aeroportuario para desarrollar su actividad de "forma sostenible", investigando activamente las posibilidades que en materia de eficiencia energética y cuidado medioambiental puede reportar la introducción de vehículos eléctricos en la flota de vehículos aeroportuarios.
Por su parte, MMCE se ha beneficiado del conocimiento que se ha extraído de esta experiencia piloto, en una fase previa al comienzo de su comercialización en España.
La iniciativa, se enmarca dentro de la fase previa al 'Estudio de Viabilidad del Vehículo Eléctrico en el Entorno Aeroportuario' que AENA tiene previsto realizar este año, en línea con el impulso del vehículo eléctrico por parte del Gobierno.
PRUEBA PILOTO.
Para el desarrollo de este proyectos, se utilizaron dos vehículos eléctricos i-MiEV con el uso de las velocidades requeridas, sin superar los límites legales establecidos por la Dirección General de Tráfico (DGT) y la normativa interna del aeropuerto madrileño, sin exceder la velocidad máxima homologada por el fabricante.
El personal de AENA, debidamente formado por MMCE, fue el encargado de probar ambos vehículos en la instalación aeroportuaria, donde se implantaron dos o tres puntos de recarga temporales en zonas de Barajas determinadas por AENA.
Los vehículos se usaron en horarios diurnos, excluyendo los fines de semana, para trayectos puntuales, efectuando la carga total o parcial, si lo requería la operatividad de sus usuarios, de forma nocturna.
Concretamente, los vehículos eléctricos seleccionados reemplazaron a los vehículos convencionales en las labores de transporte del personal de Ingeniería y Mantenimiento del aeropuerto y personal de operaciones.
Las pautas seguidas tuvieron un comportamiento regular y estándar de forma que el servicio y actividades prestadas fueron las que usualmente se desarrollan en el aeropuerto de Madrid-Barajas.
