CHICAGO (EE.UU.), 17 May. (EUROPA PRESS) -
Boeing ha reducido un 31% las emisiones de dióxido de carbono de sus principales instalaciones en los Estados Unidos desde 2002 hasta lo que va de año, según se desprende del Informe Medioambiental 2010 publicado hoy.
Durante el mismo periodo, el fabricante estadounidense redujo su consumo energético un 32%, mientras que recortó en un 38% los residuos peligros y en un 43% el consumo de agua, porcentajes calculados en proporción a los ingresos. En términos absolutos, Boeing también confirma una mejora sostenida de su rendimiento medioambiental.
En dicho informe, Boeing detalla también las medidas tomadas para mejorar el rendimiento medioambiental de sus productos y reducir la huella de sus operaciones en todo el mundo, con información detallada sobre el impacto de sus operaciones en EEUU, Australia y Canadá.
Entre estas medidas figuran la producción de aviones como el 787 'Dreamliner' y el 747-8, diseñados para ser "significativamente más eficientes en el consumo de combustible y generar menos emisiones" que la generación de reactores que sustituirán o la investigación del uso de biocombustibles sostenibles en aviones comerciales y militares, a partir de algas y otras fuentes renovables.
Asimismo, el fabricante también trabaja en el desarrollo de propuestas que mejoren la eficacia del sistema global de tráfico aéreo, lo que podría reducir la huella de carbono de la aviación comercial en un 12% y ayudar a los pasajeros llegar antes a sus puertas de embarque.
Se calcula que reducir la duración media de los vuelos comerciales en un minuto podría eliminar 4,8 millones de toneladas de emisiones de dióxido de carbono cada año, destaca Boeing.
Además, también centra sus trabajos en la reducción de productos químicos utilizados para producir y mantener los aeroespaciales y en el desarrollo de paneles solares, pilas de combustible y otras formas de energía limpia.
"Somos conscientes de la importancia de proteger nuestro ecosistema", afirmó la vicepresidenta de Medioambiente, Salud y Seguridad de Boeing, Mary Armstrong, quién subrayó que el fabricante centra sus esfuerzos en "el desarrollo de soluciones innovadoras para abordar a cuestiones globales de contaminación y cambio climático".
