GUADALAJARA, 5 Mar. (EUROPA PRESS) -
Coca-Cola España, en colaboración con WWF, ha puesto en marcha una iniciativa medioambiental que contará con la participación de empleados de la compañía, quienes plantarán mañana sábado 6 de marzo en el Parque Natural del Alto Tajo, situado al noreste de la provincia de Guadalajara, alrededor de 2.000 árboles de especies autóctonas de la zona tales como sabinas, enebros o encinas.
Con la reforestación se pretende recuperar dos hectáreas de una ladera calcárea, en el paraje de la Cueva de los Casares, perteneciente al término Municipal de Riba de Saelices.
Esta zona sufrió en julio de 2005 uno de los incendios más devastadores de la región, que arrasó 13.000 hectáreas, donde se vieron afectadas cerca de 5.000 hectáreas de espacio protegido. El sabinar de Casares, con Juniperus phoenicea (Sabina mora) como especie dominante y con algunos ejemplares de Juniperus thurifera (Sabina albar) quedó arrasado, según explica la organización de la jornada en nota de prensa.
"Nos marcamos como objetivo concienciar a nuestro empleados de la importancia de la conservación de los bosques y de la protección de las numerosas especies que de ellos dependen. Una labor que consideramos prioritaria en este tipo de hábitat y que encaja perfectamente con la filosofía medioambiental de la compañía", afirma Pedro Antonio García, director de Relaciones Institucionales y Comunicación de Coca-Cola España.
Por su parte, según Juan Carlos del Olmo, secretario general de WWF España, "apoyamos este tipo de iniciativas de Voluntariado Corporativo dentro de las políticas de Responsabilidad Social de las empresas. Entendemos que estas jornadas son una excelente y sencilla forma de participar en actividades de conservación y mejora del medio ambiente, y transmitir valores de respeto por la naturaleza."
Por décimo año consecutivo, Coca-Cola España y WWF/Adena desarrollan un proyecto de estas características. Anteriormente se han realizado actuaciones de reforestación en el refugio de caza de Montejo de la Vega y el Pantano de Linares en Segovia, así como en el Pantano de Cazalegas, ubicado en Toledo. Hace ya siete años, se llevó a cabo la restauración forestal de cuatro hectáreas de este refugio natural guadalajareño.
