Publicado 07/04/2020 14:46

La Junta pone en marcha la campaña 'No cortes en verde' para controlar la calidad de sandía y melón

Invernadero de sandía
Invernadero de sandía - JUNTA DE ANDALUCÍA

ALMERÍA, 7 Abr. (EUROPA PRESS) -

La Junta de Andalucía ha puesto en marcha la campaña 'No cortes en verde' para controlar el suministro constante de melón y sandía en condiciones óptima calidad, para lo que las inspecciones se mantendrán hasta el cierre de la campaña --entre finales de junio y principios de julio-- en función de las distintos momentos de cosecha.

Durante el pasado ejercicio, la Delegación Territorial de Agricultura, Pesca y Desarrollo Sostenible de la Junta en Almería llevó a cabo 145 controles en 34 empresas en las que se revisaron unas 1.997 toneladas de estos cultivos sin que se registrasen rechazos de partidas, según ha explicado la Junta en una nota.

La delegada de Agricultura, Ganadería, Pesca y Desarrollo Sostenible, Aránzazu Martín, ha explicado que "el objetivo de la campaña es controlar la calidad de la fruta, de manera que llegue a los mercados con todos los parámetros de calidad; se realizarán análisis de residuos de productos fitosanitarios y la calidad interna de sandías y melones, de manera que esta situación extraordinaria provocada por el coronavirus no incida en modo alguno en la excelencia de nuestras productos hortícolas".

Las inspecciones las realizarán los técnicos de la Delegación Territorial de Agricultura, que ha dispuesto los números de teléfono 671569398, 950011033 y 950011034 para comunicar incidencias sobre la calidad del melón y la sandía.

La campaña se hará con la colaboración de la Interprofesional de Frutas y Hortalizas de Andalucía (Hortyfruta) y todos sus miembros asociados, con el objetivo de facilitar a la Administración las actuaciones inspectoras.

MÁS SUPERFICIE DE CULTIVO

Según los datos analizados por la Delegación Territorial de Agricultura, Ganadería, Pesca y Desarrollo Sostenible, la superficie estimada para la campaña 2019-2020 para melón va a ser ligeramente superior a la campaña anterior, alcanzando las 2.650 hectáreas, un dos por ciento más, y para sandía de 10.600 hectáreas, un uno por ciento más.

En el caso de melón, el dato relevante es que se va a producir un incremento de superficie para el melón amarillo y un descenso importante para la superficie dedicada a melón galia y cantaloup.

Si para la pasada campaña la superficie dedicada al cultivo de melón piel de sapo fue de un 34 por ciento, para esta campaña se espera una subida hasta de un 45 por ciento. En cuanto al melón tipo galia, la pasada campaña la superficie dedicada a esta fue de un 26 por ciento frente al 18 por ciento esperada para 2019-2020.

El melón tipo amarillo tuvo una superficie del 23 por ciento frente al 35 por ciento esperado para esta campaña mientras que el melón cantaloup, la pasada copó el 15 por ciento de la superficie frente al cinco por ciento de la superficie que se espera para la actual campaña.

En cuanto a la sandía, aunque el aumento es muy leve, la diferencia con respecto a esta campaña es que la superficie de la sandía temprana ha aumentado considerablemente debido a los malos precios del otoño o porque la sandía temprana se suele cotizar a mejor precio.

Según la delegada, "el aumento en superficie tanto de melón como de sandía en las últimas dos campañas se debe principalmente a la aparición en el mercado de variedades de gran sabor que hace que alcance un precio mayor y una importante demanda del mercado".

"En el caso de melón, el desarrollo de variedades con cualidades organolépticas que lo hagan más atractivo en el mercado está siendo más lento, aunque, no obstante, hay un nueva oferta de variedades más competitivas para nuestro sector en los últimos dos años para piel de sapo y amarillo, lo que hace aumentar su superficie", ha añadido.

BAJA EL CONTROL BIOLÓGICO

Las producciones alcanzadas en la campaña pasada 2018/19 para sandía fue de más de 589.000 toneladas y en melón de casi 121.000 toneladas. En cuanto a la superficie de control biológico para ambos cultivos, en sandía se espera una superficie de control biológico de 1.050 hectáreas y para melón de 530 hectáreas.

"En ambos casos sigue una tendencia a la baja con respecto a la campaña pasada pero no tan acusada como en años anteriores; para sandía la bajada se prevé en 100 hectáreas con respecto a la campaña pasada y para el melón de 50 hectáreas".

Martín ha afirmado que "seguimos creyendo que la utilización del control biológico en los cultivos de primavera es fundamental, ya que los problemas de virosis al principio de esta campaña en tomate tienen una relación causal directa con la reducción de la superficie de control biológico en melón y sandía, en consecuencia con la baja utilización de insectos beneficiosos".

La delegada territorial cree que "es necesario seguir apostando por la excelencia y diferenciación en la producción de melón y sandía como medio de defensa ante producciones de países terceros, y resaltar que nuestras producciones son imprescindibles y no se pueden dejar en manos de países terceros, como lo demuestra ahora la situación del coronavirus, donde la alimentación es prioritaria".