Publicado 29/10/2018 15:46

Reina Sofía e Imibic organizan un encuentro sobre el empleo de técnicas mínimamente invasivas en glaucoma

Participantes en el encuentro
JUNTA DE ANDALUCÍA

CÓRDOBA, 29 Oct. (EUROPA PRESS) -

La Unidad de Gestión Clínica de Oftalmología del Hospital Universitario Reina Sofía y el Grupo de Calidad Visual del Instituto Maimónides de Investigación Biomédica de Córdoba (Imibic) han organizado primera edición del certamen de casos quirúrgicos en glaucoma que ha permitido reunir a los principales expertos del país en esta materia.

Según ha indicado la Consejería de Salud en una nota, unos 60 oftalmólogos especializados en el abordaje de esta patología han podido abordar las cirugías mínimamente invasivas que se están practicando en la actualidad.

En este sentido, el oftalmólogo del hospital y organizador del encuentro, Rafael Giménez, ha señalado que "ha sido un encuentro muy práctico en el que hemos tenido la oportunidad de profundizar en cuestiones como las nuevas vías de administración de la medicación antiglaucomatosa, criterios de indicación de los MIGS (cirugía de glaucoma mínimamente invasiva), el tratamiento postoperatorio cuando se emplean estas técnicas, pruebas de imagen en este campo, trucos en la cirugía de implante de drenaje subconjuntivales y el papel de la cirugía tradicional en el nuevo panorama de la cirugía de glaucoma".

Además, se presentaron resultados de este tipo de cirugía con implante XEN en dos series de hospitales españoles: el Hospital General Universitario de Alicante y la Clínica de la Arruzafa de Córdoba. La especialista del Instituto de Investigación Santiago Grisolía de Valencia, María Dolores Pinazo, ha hablado de los inflamasomas en glaucoma, "un tema muy novedoso en investigación que puede permitir entender y tratar los mecanismos patogénicos a nivel molecular de la lesión glaucomatosa", según ha valorado el oftalmólogo Rafael Giménez.

En total en el certamen se expusieron las siete comunicaciones seleccionadas sobre casos clínicos que presentaron especialistas de todo el país. El primer premio fue para el caso 'Manejo del glaucoma uveítico complicado', de la especialista del Hospital Universitario de Gran Canaria Doctor Negrín, Glenda Espinosa.

Además, la especialista del Hospital Universitario de Alcalá de Henares Consuelo Gutiérrez recibió una mención especial por presentar el caso 'Glaucoma asociado a segmentos externos de fotorreceptores en el humor acuoso (Síndorme de Schwartz Matsuo)'.

El glaucoma es una enfermedad crónica asintomática hasta fases tardías. Se caracteriza por una lesión del nervio óptico y pérdida progresiva de campo visual. El factor más importante es la presión intraocular elevada y existen también factores genéticos en su desarrollo. Es la segunda causa de ceguera en el mundo y su prevalencia es de un dos por ciento en la población general, elevándose este porcentaje con la edad.

50% DE PACIENTES SIN DIAGNOSTICAR

Se estima que alrededor del 50 por ciento de los pacientes con glaucoma en países desarrollados están sin diagnosticar. Esto, junto al envejecimiento progresivo de la población hace que sea un problema de gran magnitud. El hospital cordobés cuenta con una Unidad de Glaucoma para centralizar la atención de estos pacientes e intentar realizar un diagnóstico precoz.

La mayoría de los pacientes que reciben asistencia aquí se encuentran en distintas fases, desde estadios iniciales hasta pérdidas severas del campo visual que limitan de forma significativa su día a día. La intervención quirúrgica del glaucoma puede realizarse como cirugía mayor ambulatoria, es decir, el paciente vuelve a casa el mismo día tras su recuperación, y se llevan a cabo en los quirófanos del Hospital Los Morales y del Provincial. Esta unidad ha sido pionera en la incorporación de técnicas mínimamente invasivas más seguras que las técnicas tradicionales.

El abordaje de primera elección del glaucoma es farmacológico (prostaglandinas, betabloqueantes, agonistas adenérgicos e inhibidores de la anhidrasa carbónica) y cuando esta medicación no logra frenar el desarrollo de la enfermedad se recurre a la cirugía con la finalidad de que la presión intraocular se mantenga dentro de unos márgenes adecuados.

La evolución de la patología suele ser lenta y los procedimientos diagnósticos que habitualmente se emplean son la realización de campimetrias y pruebas de imagen del nervio óptico y de las fibras nerviosas de la retina.