CAZORLA (JAÉN), 29 Nov. (EUROPA PRESS) -
La Junta de Andalucía ha destacado la consolidación y el crecimiento de El Horno de José A. García, Alma Gaia y Macorina, tres empresas de "gran relevancia y protagonismo" en la economía de Cazorla (Jaén).
La delegada territorial de Conocimiento y Empleo, María Paz del Moral, ha visitado hoy en Cazorla estas firmas, junto con el alcalde, Antonio José Rodríguez, donde ha destacado "la importante aportación para el empleo local, puesto que los tres negocios suman 25 trabajadores, y al mismo tiempo, cada negocio, desde su ámbito profesional, impulsa las muchas riquezas de Cazorla y su comarca y sigue creciendo anteponiendo siempre la calidad".
Del Moral ha subrayado que se trata de "tres ejemplos muy gráficos que muestran cómo una pequeña empresa mueve la economía y el empleo rural". Así, ha hecho hincapié en "el talento de sus promotores y su esfuerzo constante, no solo por mantener sus puertas abiertas, sino por avanzar y también ser una llave fundamental en el desarrollo y en la vida del municipio". Tres firmas que cuentan con el respaldo y el asesoramiento del Centro Andaluz de Emprendimiento (CADE).
La delegada ha destacado la trayectoria de El Horno de José A. García, con una larga experiencia profesional en la industria panadera y en el comercio, una empresa familiar con más de veinte años existencia, cuya filosofía de éxito es "ilusión y esfuerzo diario". De hecho, han obtenido su segunda Estrella Galardón a la panadería nacional por su esfuerzo y trabajo, y está reconocida como una de las 80 mejores panaderías de España.
Alma Gaia es, según la delegada, mucho más que un comercio al por menor de ropa y equipamiento deportivo y de naturaleza. Cuenta con sedes en Cazorla, Jaén, Úbeda y con una tienda virtual. Se dedica a su vez a otras actividades como la organización de eventos lúdicos o formativos sobre naturaleza.
Respecto a Macorina, Del Moral ha apuntado la originalidad y creatividad de este espacio gastronómico, dedicado especialmente a la cocina cosmopolita y vanguardista Nikkei (peruano-japonesa), con un peculiar toque de tradición cazorleña. Se trata de un negocio que da empleo a mujeres jóvenes y que utiliza productos ecológicos de alta calidad de la comarca.
