Publicado 16/09/2018 10:32

La Junta realiza más de 5.200 sesiones informativas en cotos de caza y explotaciones ganaderas sobre el uso del veneno

SEVILLA, 16 Sep. (EUROPA PRESS) -

Técnicos de la Estrategia Andaluza contra el Veneno de la Consejería de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio han realizado más de 5.200 sesiones informativas en cotos de caza y explotaciones ganaderas para sensibilizar y concienciar sobre el problema que genera el uso ilegal de cebos envenenados, desde el inicio en 2004 del plan de acción contra esta práctica ilegal y hasta 2017, año en la que se llevaron a cabo 826.

En concreto, se han llevado a cabo 2.962 sesiones de trabajo con cazadores y 2.299 con pastores y ganaderos, en las que se han abordado, entre otros temas, el riesgo del uso del veneno, la Ley andaluza de Flora y Fauna Silvestres, el empleo de prácticas ecológicas ganaderas, la existencia de la unidad canina en todo el territorio andaluz, la formación en gestión cinegética, la cadena de custodia, así como conocer de forma pormenorizada cuales son los verdaderos motivos que empujan en las distintas comarcas de Andalucía a la colocación de cebos envenenados, según detalla la Junta en una nota.

De este conocimiento se pueden extraer posibles soluciones para resolver los problemas que les acucian y adoptar medidas adecuadas con el fin de frenar la colocación de cebos envenenados.

Por provincias, destacan Granada, Jaén y Cádiz, con 967, 705 y 287 sesiones con ganaderos, y 411, 425 y 518 con el sector cinegético. Estas tres provincias sobresalen también por la concentración del trabajo realizado hasta la fecha para sellar al veneno las áreas de reintroducción del quebrantahuesos y los territorios del alimoche.

En los primeros años de la estrategia, las reuniones informativas celebradas eran mayormente con el sector cinegético, aunque con el paso de los años ha cobrado importancia el sector ganadero, al detectarse una problemática especial en algunas zonas relacionadas con la gestión de los depredadores en época paridera, según indican desde la Consejería de Medio Ambiente.

Estas sesiones se han ampliado también a las corporaciones municipales para informarles de las líneas de trabajo que se están desarrollando para combatir el uso del veneno y para que estas instituciones colaboren en la divulgación del problema.

A ello hay que añadir las campañas de concienciación ciudadana como las realizadas en Castril, en Granada; Nacimiento, en Almería; Los Barrios, Alcalá de los Gazules y El Gastor, en Cádiz; Génave, en Jaén; y Júzcar, en Málaga.

ESTRATEGIA CONTRA EL VENENO

Las actuaciones que desarrolla la Consejería de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio desde 2004 a través del Plan de Acción Andaluz de lucha contra el uso de cebos envenenados ha logrado reducir en un 55 por ciento esta práctica ilegal en la región, que "tan devastadores efectos ocasiona en el medio natural y en la salud pública".

En esta línea, la Consejería ha suscrito recientemente con asociaciones agrarias, cinegéticas y ambientalista el Pacto Andaluz contra el Veneno, con el que se pretende "implicar a las administraciones locales y a la sociedad en general".

Desde la Junta inciden en que la utilización de cebos envenenados en el medio natural es el principal problema de conservación de las aves necrófagas, además de afectar a otras especies emblemáticas en peligro como el lince ibérico y el águila imperial.

Su uso, vinculado principalmente a una mala práctica cinegética y ganadera tal y como demuestran las sentencias judiciales habidas hasta la fecha, se encuentra prohibido desde 1983, y desde 1995 se considera un delito penal.