Asegura que el pueblo vasco "no se resigna" ante "argumentos que recuerdan a la España imperial y la dictadura franquista"
VITORIA, 26 Sep. (EUROPA PRESS) -
El lehendakari, Juan José Ibarretxe, afirmó hoy que la consulta se llegará a celebrar "pese a los límites de la alambrada" que el PSOE y PP han puesto a través del Tribunal Constitucional. Tras calificar de "pírrica victoria" la del presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, al "imponer" la suspensión de la Ley de Consulta, aseguró que los vascos reclamarán en Europa el derecho a decidir porque el Estado español "está violando el Convenio Europeo de Derechos Humanos".
Durante su intervención en el último pleno de política general de este legislatura, el lehendakari aseguró que los miembros del Gobierno vasco, "a título personal, junto con otros miles y miles de ciudadanos vascos, van a alzar su voz en Europa con el objetivo de restituir el derecho de opinión y participación política, que injusta e incomprensiblemente ha sido suspendido".
"Si una simple consulta puede poner en riesgo, nada más y nada menos, que la sacrosanta soberanía de la nación española, es que realmente la nación española es muy endeble", aseveró.
Tras señalar que sólo podrá existir "una relación de convivencia libre entre el pueblo vasco y el pueblo español", si a los vascos se les permite expresar su opinión al respecto, Ibarretxe aseguró que la decisión del TC es "una ataque frontal al autogobierno político", por lo que apostó "por una respuesta serena y pacífica, pero también firme y contundente". En este sentido, destacó que la sociedad "le ha quitado a ETA la llave y el protagonismo" porque "ETA jamás decidirá el futuro de la sociedad vasca".
El lehendakari centró su discurso en asegurar que hay que afrontar tres agrandes obstáculos, la ruptura de la tregua por parte de ETA, la suspensión de la Ley de la Consulta y la crisis económica internacional.
En este sentido, se congratuló de haber situado "en el centro del debate político el derecho a decidir". "No se puede utilizar permanentemente el recurso a los tribunales como alambrada para prohibir el derecho de los ciudadanos vascos a ser consultados", advirtió.
A su entender, el tripartito ha tenido "el liderazgo y la valentía política para plantear en el Parlamento vasco un camino democrático para solucionar el conflicto vasco" y ha abierto "un nuevo ciclo político, poniendo la llave de la solución en manos de la sociedad vasca".
El lehendakari aseveró que "el futuro de Euskadi no se puede decidir en una negociación entre el Gobierno español y ETA", porque la sociedad vasca "no necesita la tutela ni tampoco las imposiciones de nadie". Tras afirmar que "no divide quien consulta, sino quien prohíbe consultar", explicó que, "frente al muro del 'No'", él ha liderado "la iniciativa política para evitar caer de nuevo en la espiral de la violencia y del no-diálogo".
En este contexto, insistió en que el Tribunal Constitucional declaró, el pasado 11 de septiembre, inconstitucional "el derecho de la sociedad vasca, simplemente a ser consultada, porque, según ellos, pone en riesgo la soberanía nacional española".
Ibarretxe calificó de "pírrica" la victoria que supone la suspensión "dictada por el señor Rodríguez Zapatero, anunció que los vascos reclamarán su "derecho en Europa", y dijo que, aunque ahora pretendan negar a la ciudadanía vasca, "incluso, el derecho a recurrir a las instancias europeas", puntualizó que no van a quedarse "con los brazos cruzados". "El camino está trazado y la consulta, más pronto que tarde, será inevitable", subrayó.
En su opinión, el Presidente del Gobierno central "ha elegido un camino equivocado y fracasado porque someter, imponer y pisotear los deseos de la mayoría de la sociedad vasca nunca será la solución".
Pese a ello, afirmó que no retirará "la mano tendida" a Rodríguez Zapatero porque "es preciso lograr un acuerdo de normalización, respetando el derecho de la ciudadanía vasca a ser consultada". "Hemos recorrido un camino que no tiene vuelta atrás, pero tenemos pendiente de abordar un verdadero proceso de Diálogo con mayúsculas y sin exclusiones", insistió.
En esta línea, manifestó que "no se puede engañar a la sociedad vasca proponiendo un diálogo político tramposo y con las 'cartas marcadas', en el que el PP y el PSOE se reservan 'el cepillado' posterior de los acuerdos en Madrid", y en el que "se excluye a una parte de la sociedad vasca, prohibiendo e ilegalizando, cuando interesa electoralmente, a partidos políticos que representan a miles de vascos". "Este diálogo tramposo, con minúsculas, está abocado al fracaso", consideró.
Para el lehendakari, la sentencia del el TC "no deja lugar a dudas: consultar a la ciudadanía vasca está prohibido porque pone en peligro la soberanía de la nación española, única e indivisible". "El PSOE y el PP, utilizando al Tribunal Constitucional, nos han señalado claramente los límites de la alambrada, sin caretas", subrayó.
A su juicio, de esta forma, se impone que "sólo existe una nación, la nación española, que sólo existe un pueblo soberano, el pueblo español, y que el pueblo vasco no existe y no tiene derecho a decidir". "En definitiva, argumentos que me recuerdan a los de la España imperial, 'una, grande y libre', que esgrimió la dictadura franquista. Hoy, como entonces, el pueblo vasco no se resigna", apuntó. En esta línea, apuntó que "facilitar las consultas populares es el futuro, prohibirlas es el pasado".
"CITA PENDIENTE CON LA PAZ"
Durante su intervención, reconoció que "es evidente" que existe "una cita pendiente con la paz", y recordó que ETA "sigue atentando" contra el derecho a la vida, "asesinando, de nuevo, a una persona inocente el pasado lunes día 22 en Cantabria".
Asimismo, dijo que la ilegalización de EHAK y ANV, "confirman una estrategia política puesta en marcha" con la Ley de Partidos, que ha traído "como consecuencia la criminalización del diálogo y la exclusión democrática de una parte de la sociedad vasca".
A su juicio, ésta "no es la solución" porque "sólo el diálogo y el respeto a todos los derechos humanos de todas las personas, sin exclusiones, conducirá a la normalización y a la paz".
El lehendakari recordó que apoyó "públicamente el último intento del proceso de paz", que "ha sido un intento fracasado", pero "honesto". "Di mi palabra de que, incluso en los momentos más difíciles y complicados, estaría dispuesto a mantener y a facilitar el diálogo, sin exclusiones, y la he cumplido", aseveró.
Asimismo, destacó que, por esta razón, "ha sido encausado penalmente por primera vez en la historia, por hablar". "He cumplido con mi deber y lo seguiré haciendo", indicó.
Además, anunció que su Gabinete "seguirá trabajando incansablemente por la paz". "ETA sigue siendo el principal y un dramático obstáculo para la paz y la convivencia. Es evidente que ETA puede seguir produciendo dolor y sufrimiento, como lo ha demostrado con los últimos atentados cometidos, pero también es cierto que su tiempo ha llegado a su fin", añadió.
En este sentido, dijo que la banda "es un dramático obstáculo que es preciso solucionar cuanto antes" y ella "lo sabe". "Sólo le queda un camino: declarar unilateralmente de forma inequívoca y concluyente su voluntad de poner fin al terrorismo y dejar en manos de los representantes políticos vascos la solución de los problemas políticos", manifestó.
En esta línea, dijo que "todos y cada uno de nosotros deseamos tener la oportunidad de decirle a ETA con claridad que se vaya definitivamente de nuestras vidas". "Vamos a alzar nuestra voz para exigir a ETA que se comprometa a respetar la palabra y la decisión del pueblo vasco y, en consecuencia, deje de asesinar y extorsionar, de una vez y para siempre", agregó
