Prevén ayudas para "amortiguar los daños económicos" al sector de esta enfermedad "virulenta" sin "tratamiento efectivo"
BILBAO, 13 Sep. (EUROPA PRESS) -
Las tres Diputaciones, el Gobierno Vasco y el sector forestal de Euskadi se han unido para "controlar" la denominada 'banda marrón', enfermedad que afecta "con mucha virulencia" a los pinos de la Comunidad Autónoma Vasca y que mantiene "un comportamiento expansivo". Entre otras medidas, las instituciones prevén ayudas para "amortiguar los daños económicos" al sector de esta enfermedad que no tiene tratamiento "con garantía de efectividad".
En sendos comunicados, las tres diputaciones vascas han asegurado que trabajan "desde hace meses" con el sector forestal y con el Gobierno Vasco para tratar de controlar el avance, el los tres Territorios, del hongo responsable de la enfermedad conocida como "banda marrón en los pinos"
Este hongo, han apuntado, afecta "con mucha virulencia" a las plantaciones de esta especie, "con un comportamiento expansivo desconocido hasta el momento". "Se trata, por tanto, de una situación inusual ante la cual las instituciones forales han reaccionado desde la detección de las primeras afecciones", han señalado.
Según han indicado, la "excepcionalidad de la situación" ha hecho necesario establecer, ya en octubre de 2017, un Grupo de Trabajo Asesor Forestal, que se ha reunido el mismo mes de su creación, en enero, abril, julio y este mismo jueves.
En grupo, en el que también participan el Gobierno Vasco, Neiker y Baskegur (en representación de los propietarios de masas forestales y del sector transformador de la madera), ha abordado "todas las cuestiones referidas al control de esta enfermedad y las alternativas posibles para frenar su avance".
En la actualidad, se trabaja en todos los territorios, principalmente en cinco líneas de actuación, "el monitoreo de las zonas afectadas y el seguimiento de la expansión de la enfermedad, la investigación y experimentación con productos fungicidas en parcelas públicas establecidas a tal fin, la recogida de piñas de ejemplares que se han mostrado resistentes a la enfermedad para su reproducción y multiplicación, la búsqueda de especies alternativas de pino que ofrezcan resistencia a la banda marrón y se adapten bien al medio en la Comunidad Autónoma Vasca", y el establecimiento de líneas de ayudas para paliar los daños económicos en el sector.
Según han apuntado, el control de la enfermedad "se ve dificultado" ante la inexistencia de un tratamiento "con garantía de efectividad", que prevenga la infección de los ejemplares no afectados, y que "cuente con garantías de efectividad y la preceptiva autorización para su uso por parte del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación".
Las tres diputaciones han manifestado su compromiso por "seguir trabajando junto con el sector forestal" para "garantizar la sostenibilidad y el desarrollo de este sector tan importante para nuestros territorios desde el punto de vista social, ambiental y económico".
Con este objetivo, la Diputación Foral de Bizkaia, ha desarrollado "acciones de contingencia" desde que tuvo conocimiento de las primeras afecciones por este hongo en la zona este del territorio. Entre enero y febrero de 2018 realizó una primera prospección para conocer la superficie afectada, que se repitió en el mes de julio. Entonces se determinó que la afección alcanzaba las 16.000 hectáreas.
También ha realizado analíticas en el laboratorio de sanidad vegetal dependiente del Departamento de Sostenibilidad y Medio Natural "con el objetivo de determinar las cepas de los hongos causantes de la enfermedad". Por ello, se han establecido unas parcelas de terreno propiedad de la Diputación en las que realizar ensayos con tratamientos fungicidas "para conocer la viabilidad de uso de estos productos y actuar contra la banda marrón".
Asimismo, se han recogido piñas de pies resistentes a la enfermedad para su reproducción y multiplicación, y se han enviado a Neiker con el objetivo de "obtener material que sirva para la reproducción vegetativa y la obtención de ejemplares de Pino Radiata resistentes a la enfermedad".
También se han adoptado medidas "para amortiguar los daños económicos que está produciendo esta enfermedad a las personas profesionales del sector". Además, ha prestado asesoramiento y tramitado permisos de corta y eliminación de masas forestales afectadas, sobre las que han emitido informes de afección "para que sus propietarios obtengan las ayudas que compensan las pérdidas sufridas por la corta de pinares de menos de 25 años".
El Departamento de Sostenibilidad y Medio Natural estableció un decreto de ayudas, cuyo plazo de solicitud ya ha finalizado, que preveía compensaciones por un importe global de 1,4 millones de euros.
La Diputación elabora ahora un nuevo decreto que incluirá, además de las ayudas para la corta de pinares afectados de menos de 25 años, una línea para la recuperación de las zonas infectadas por esta enfermedad. También se ha reunido con vecinos las zonas afectadas y ha coordinado sus actuaciones con las otras dos diputaciones y la Asociación de Forestalistas de Bizkaia.
Asimismo, ha suscrito un convenio con el Instituto de Investigación Agronómica de Francia (INRA) para se transfiera a Bizkaia material genético de una colección de clones de diferentes variedades de una especie de pino, la Criptomeria japónica, que ha demostrado ser resistente a la enfermedad y que se adapta bien a las condiciones en Bizkaia.
Esta, según la Diputación, "podría ser una alternativa a las especies plantadas hasta ahora". Los ejemplares cedidos por el INRA se plantarán este próximo invierno en varias parcelas de titularidad foral.
ÁLAVA
En el caso de Álava, la institución ha mantenido reuniones trimestrales con Baskegur en las que ha analizado la evolución de la enfermedad y se han planteado alternativas para luchar contra ella.
Durante la Asamblea de la Asociación de Forestalitas de Álava, celebrada en Amurrio el 9 de junio, técnicos del Servicio de Montes de la Diputación informaron a los propietarios forestales de "la evolución de la banda marrón" y las labores de prospección y muestreo realizadas en el monte.
Según la institución alavesa, la comunicación con el sector "ha sido constante", y se ha informado y asesorado, "a través del guarderío" a los propietarios forestales sobre las medidas silvícolas incluidas en el Plan de Ayudas "para contener y minimizar en lo posible el riesgo de contaminación", entre ellas los clareos y limpiezas.
GIPUZKOA
También en Gipuzkoa, primer territorio en el que se declaró esta enfermedad, se trabaja "en el desarrollo de diferentes medidas", como la corta de pinos adultos y el establecimiento de ayudas para la reforestación, la corta de pinos afectados por la enfermedad y ayudas para la plantación de nuevos pinos, subvenciones "para el tratamiento de la enfermedad ola realización de tratamientos aéreos para prevenir la procesionaria y evitar así un debilitamiento de los pinos que los hiciera más vulnerables a la banda marrón".
Estas medidas, según la Diputación guipuzcoana, se han llevado a cabo mediante el "notable aumento" en el presupuesto de las convocatorias de ayudas a la propiedad forestal. Aunque se han impulsado nuevas plantaciones, "esto no ha conseguido frenar el avance de la enfermedad".
Por ello, pretende promover "nuevas plantaciones de especies resistentes a esta enfermedad" y estudiar "medidas" para acabar con ella. En los casos en los que los pinos se hayan secado y la única opción sea la replantación, la Diputación de Gipuzkoa dará ayudas para la tala y plantación de nuevas especies. En los que "se esté aún a tiempo", se tratarán "con medidas que se demuestren efectivas para hacer frente a la enfermedad", como la aplicación de "tratamientos que de otros lugares, siempre que la ley lo permita".
