Gesto cree que se han dado pasos de gigante para la paz porque ya nadie legitima a ETA "salvo en las entrañas" de la IA

Actualizado: domingo, 24 octubre 2010 13:10

BILBAO, 24 Oct. (EUROPA PRESS) -

La Coordinadora Gesto por la Paz cree que la sociedad vasca "ha dado pasos de gigante en la conquista" de la pacificación, porque "nadie legitima el terrorismo de ETA", salvo que se hurgue "en las entrañas" de la izquierda abertzale.

En el último número de su publicación 'Bake Hitzak' (Palabras de paz), la agrupación pacifista recoge testimonios de personas de diferente procedencia ideológica -tres de las cuales pertenecieron a ETA- sobre cuál era la visión que se tuvo de la banda terrorista en el momento de su nacimiento y durante sus primeros años de dictadura franquista, y si existió "una ETA buena".

En su introducción, recogida por Europa Press, Gesto afirma que, en la actualidad, "es muy difícil, por no decir imposible, salvo que se hurgue en las entrañas de la izquierda abertzale, encontrar discursos legitimadores del terrorismo que ETA ejerce" contra el Estado de Derecho, el sistema democrático y la sociedad en general.

En este sentido, considera que "la sociedad vasca ha dado pasos de gigante en la conquista de la paz, al iniciar el camino de la deslegitimación del terrorismo de ETA". "Y nos tenemos que felicitar por ello, siempre tarde, eso sí", subraya.

No obstante, recuerda que, "cuando se plantea la legitimidad de ETA antes de la democracia, la respuesta ya no es tan evidente". En esta línea, apunta que, cuando nació ETA y en sus primeros años durante la dictadura de Franco, "la izquierda, el nacionalismo, la oposición al régimen y mucha gente, en general, miraron a ETA de una manera muy concreta".

Asimismo, resalta que, tras terminar la dictadura, en los primeros años de democracia, "esa visión, lejos de cambiar, se mantuvo y ha perdurado durante demasiado tiempo".

"LA ALIENACIÓN DE MILES DE VASCOS"

El analista político Kepa Aulestia, que fue miembro de ETA político militar, asegura en un artículo de la revista de Gesto por la Paz, que "la infausta historia del terrorismo vasco y su éxito sólo pueden ser explicados por la capacidad que ha demostrado para desarrollar una moral propia que ha logrado alienar a decenas de miles de vascos".

Tras señalar que "todos los grupos que practican el terrorismo generan su particular ética de la violencia", precisa que, "de todas ellas, la de ETA ha alcanzado los mayores niveles de sofisticación, sencillamente porque se ha visto obligada a justificar el asesinato durante un largo periodo de tiempo".

A su juicio, "si las actividades de ETA no se hubiesen reanudado a los pocos días de promulgarse la amnistía, la actuación de ETA hubiera quedado consignada como uno de los factores que echaron abajo la dictadura, sin que, probablemente, nadie procediera al juicio moral de su actuación durante ese tiempo". "Es la perpetuación y el recrudecimiento del terrorismo durante los 30 años de democracia lo que vuelva la mirada hacia sus orígenes", ha indicado.

SIN AUTOCRÍTICA

Asimismo, cree "significativo que ninguna de las escisiones grupales o desafecciones personales que ha sufrido ETA a lo largo de décadas, haya dado lugar a una reflexión autocrítica y a un juicio moral sobre el mal causado por quienes, en un momento determinado, han renunciado a las armas".

"Los sectores que abandonan sucesivamente las armas -en 1977 y 1980, e incluso quienes recientemente han cuestionado su uso desde la cárcel- comparten un mismo discurso con alguna variante: la violencia ya no tiene sentido y es más perniciosa para los intereses del pueblo vasco", señala.

Aulestia dice que "tienden a situar la línea de separación entre lo correcto y lo incorrecto en el momento en que ellos deciden dejarlo", y admite que "es probable que ésa sea también la actitud de quienes, en adelante, renuncien a las armas", porque "el juicio retrospectivo resulta insoportable para quienes han ligado su vida o una parte considerable de ella al ejercicio de la violencia".