SAN SEBASTIÁN, 23 Jun. (EUROPA PRESS) -
El Gobierno vasco ha afirmado que proteger el edificio Bellas Artes de San Sebastián "no conlleva una obligación de financiación" por su parte, al tiempo que ha defendido que no le corresponde llevar "el liderazgo" en este asunto, ya que es competencia del Gobierno municipal y de la empresa propietaria, la Sade.
El viceconsejero de Cultura, Juventud y Deportes, Josean Muñoz, ha comparecido este lunes en la comisión de Cultura del Parlamento vasco, a petición de ésta, para informar sobre la incoación del expediente de protección del Bellas Artes donostiarra.
Según ha explicado, se prevé que el citado expediente se publique en el Boletín Oficial del País Vasco a finales del próximo mes de julio, de manera que desde esa fecha "no podrá haber ninguna intervención que ponga en riesgo el edificio".
Muñoz ha apuntado que después habrá 20 días de exposición pública y transcurridos y recabadas alegaciones, se responderá a ellas y se redactará la propuesta definitiva, "entonces se decidirá si se trata de un bien inventariado o calificado". "Hay un plazo tasado de como máximo un año, no puede ser superior", ha apuntado.
Por otro lado, ha indicado que "por parte de la empresa se ha alegado que el edificio está en declaración de ruina", pero "era una declaración no suficientemente válida". "Se tendrá que ver el deterioro y si está en ruina o no, porque hay un paso importante", ha apuntado.
El viceconsejero ha destacado que "el hecho de proteger el edificio no supone invalidar sus oportunidades de uso por la propiedad", con la que ha asegurado la relación "sigue estando abierta" y ha destacado que hay que explicarle que este no es un solar, sino un edificio "histórico", algo que es "positivo, no una rémora".
Además, ha afirmado que el Gobierno vasco "no se plantea tener el liderazgo a la hora de determinar los usos del edificio", sino que "lo que tiene que hacer es definir un marco en el que se tengan que pensar las actividades culturales, económicas o que sea que se van a desarrollar en ese lugar".
"No corresponde al Gobierno adoptar el liderazgo en este asunto, corresponde a la empresa o al Gobierno municipal, si lo adoptáramos entraríamos en terreno ajeno", ha incidido, para añadir que también correspondería, en su caso, al Ayuntamiento solicitar la declaración de ruina.
Tras criticar que el Gobierno local "ha ido con lentitud" en lo que respecta a este asunto, algo que "no ayuda", ha vuelto a recordar que el papel del Ejecutivo vasco es únicamente "establecer un marco para que se actúe lo mejor posible" y "buscar el equilibrio" entre la protección y sus posibles usos. En este sentido, ha señalado que el hecho de que el Gobierno vasco decida incoar un proceso de protección del edificio "no va vinculado a una obligación de financiación" del proyecto a desarrollar en el mismo.
Muñoz ha puntualizado que cualquier debate sobre la participación del Gobierno vasco en un posible uso cultural del edificio "vendría motivado por ese posible uso, pero el liderazgo tendrá que venir de la propia ciudad". "No nos vamos a sentir obligados a entrar en una actuación de financiación", ha incidido, para añadir que espera que "no se haya decidido ya" si el futuro del Bellas Artes pasa por un proyecto público o privado, "que no se hayan cerrado las puertas a lo privado".
