El Gobierno vasco estará "vigilante" con la trama de Álava para "defender los intereses de los ciudadanos"

Actualizado: sábado, 22 mayo 2010 11:03

Afirma que el Ejecutivo está demostrando "cintura política" en la negociación del Plan de Convivencia y confía en lograr el consenso

Cree que, si alguien tenía "dudas" sobre posibles contactos entre ETA y el PSE, se habrán "disipado" con la operación en Francia

Dice que todos en la izquierda abertzale son conscientes de que la violencia no es el camino, y "la cuestión es cuándo y cómo se acaba"

BILBAO, 22 May. (EUROPA PRESS) -

El consejero de Vivienda, Transportes y Obras Públicas del Gobierno vasco, Iñaki Arriola, aseguró hoy que el Ejecutivo estará "vigilante" en el caso supuesta trama de corrupción en Álava, en el que están imputadas 11 personas vinculadas al PNV, entre ellos, el viceconsejero de Cultura de la Administración de Ibarretxe, Gurutz Larrañaga. En este sentido, aseveró que el Gabinete de Patxi López "estará a la altura" y defenderá "los intereses de los ciudadanos vascos".

Además, consideró que el Ejecutivo del PSE-EE está demostrando tener "cintura política" en la negociación que mantiene con el PNV sobre el Plan de Convivencia Democrática y Deslegitimación de la Violencia, y confió en lograr el consenso, porque no duda de que existe "voluntad política" para conseguirlo.

También se refirió a "los rumores" sobre una posible negociación entre el Gobierno o el Partido Socialista y ETA, para manifestar que, si "alguien tenía dudas", se le habrán "disipado" con la operación desarrollada esta semana en Francia en la que se detuvo a la cúpula militar de la banda armada. A su juicio, "todos" en la izquierda abertzale son conscientes de que la violencia no es el camino, y "ahora la cuestión es cuándo y cómo se acaba".

En una entrevista concedida Europa Press, el consejero y secretario general del PSE-EE de Gipuzkoa se refirió a la pretensión del Gobierno vasco de personarse en la causa abierta por supuesta corrupción en Álava, y afirmó que "la prudencia no tiene que estar reñida con el rigor".

Por ello, dijo que el Ejecutivo estará "vigilante desde el punto de vista de lo que es el interés público y lo que le afecta como Gobierno". No obstante, realizó un llamamiento a "no hacer aspavientos con este asunto".

"Aquí la Justicia funciona y estaremos personados en la causa para hacer la defensa adecuada de nuestros intereses. A veces, la Justicia es desesperadamente lenta, pero funciona", aseveró.

En esta línea, recordó que fue en el Consejo de Gobierno del pasado martes en el que el Ejecutivo decidió personarse en el caso, tras proponerlo el consejero de Industria, Bernabé Unda, cuyo Departamento es el principal accionista del Parque Tecnológico de Miñano, en cuya gestión durante la pasada legislatura se centra buena parte de las investigaciones de esta causa.

PLAN DE CONVIVENCIA

Iñaki Arriola también aludió a la negociación que representantes del Ejecutivo llevan a cabo con el PNV para tratar de llegar a un consenso en torno al Plan de Convivencia Democrática y Deslegitimación del Terrorismo, para afirmar que tiene "confianza" en que se logrará el acuerdo. "Creo que ha habido voluntad política de poder alcanzarlo y tampoco parece que fuera necesario aplazar muchos los tiempos", señaló.

En este sentido, dijo que, tras la reunión mantenida esta semana por las comisiones negociadoras, la formación jeltzale realizará "una propuesta" porque "todavía no estaba satisfecha" con el texto que el Gabinete de López "había puesto encima de la mesa". "Parece que van a hacer algunos retoques", apuntó.

En su opinión, éste "es un tema sensible" en el que "sería muy conveniente, positivo y necesario" que el conjunto de partidos democráticos tuvieran "una postura común porque afecta al tratamiento en educación y a la sensibilidad con las víctimas, etc", con el objetivo de que "esta cuestión no entre dentro de la confrontación política". "Esperamos que todos los partidos tengan la misma responsabilidad que tenemos nosotros y eso permita llegar a un acuerdo", indicó.

En esta línea, destacó que "la mano" del Gobierno vasco "está tendida y lo ha estado siempre". "Hemos demostrado y estamos demostrando en este asunto, como en otros muchos otros, tener cintura y estoy convencido de que, si hay voluntad política, que no dudo que la haya, llegaremos a un acuerdo entre el conjunto de los partidos democráticos, especialmente, entre los partidos de mayor representación para tener una base común", insistió.

Tras negar que exista ninguna "intención de adoctrinamiento" en el Plan de Convivencia, subrayó que el objetivo es "transmitir valores universales que deberían ser también universalmente compartidos". "A mí me gustaría que hubiera un acuerdo cuanto antes, pero, en estos momentos, el asunto está en un proceso de diálogo y negociación, y no sé el tiempo que tardará el PNV en hacer su propuesta, y en la medida en la que haga, el PSE-EE valorará prontamente la respuesta", señaló.

PP

Sobre la postura que pueda mantener el PP respecto al texto tras las modificaciones del documento que puedan suponer las conversaciones con el PNV, manifestó que los populares tienen que estar "en ese consenso".

En este sentido, dijo que "no sería bueno" que el Partido Popular se opusiera al texto que salga acordado, porque "se trata de buscar elementos en común entre diferentes", pero que comparten "lo básico", y hay que buscar lo que les une, "sin introducir cuestiones que puedan suponer rechazo por parte de nadie".

"Es importante que consigamos mantener ese común denominador hoy en día en una coyuntura como la tenemos, en una sociedad como la vasca que todavía no es una sociedad en paz", afirmó.

Además, consideró que "no corre peligro" el pacto entre socialistas y populares vascos, pese a las desconfianzas que se despertaron esta semana en el PP vasco en torno a una hipótetica negociación entre ETA y el PSE-EE.

SIN CONTACTOS CON ETA

"El PSE ya ha dicho claramente que no existen esos contactos y, si había alguna duda, a partir de las detenciones en Francia, habrá menos. Con las detenciones de Baiona, si alguien tenía dudas de que había algún contacto del PSE-EE o el Gobierno con una banda terrorista, se disiparán", aseveró.

En esta línea, subrayó que los socialistas lo tienen "claro" después de que intentaran "que la paz llegara de una forma dialogada en un proceso histórico, en el que el propio presidente del Gobierno pidió autorización al Parlamento para que hubiera contactos".

Iñaki Arriola recordó que "ese proceso acabó con el atentado de Barajas, y se frustró esa posibilidad". "A partir de ahí, lo que se vio es que ése no era el camino apropiado porque, cada vez que se ha intentado, de forma reiterada ha sido frustrado por la banda terrorista. Y aquí de lo que se trata es de acabar con ETA, de que se acabe la violencia en este país y, en ese sentido, el camino emprendido no tiene retorno", aseguró.

Para Arriola, "la situación de ETA ha ido deteriorándose a ojos vista en los últimos tiempos", y recordó "cómo ha ido evolucionando la caída de sus jefes en muy poco tiempo de uno a otro". Sin embargo, puntualizó que "eso no quiere decir que se haya acabado con ETA porque cuesta acabar con una organización de esas características".

"Es cierto que su capacidad de acción está muy afectada, pero no quiere decir que no tengan capacidad mañana de hacer una barbaridad porque siempre matan, sobre todo, a la gente indefensa. Y eso es fácil", dijo.

Por último, se mostró convencido de que "todos en ese mundo son conscientes de que continuar en el camino de la violencia, de la muerte y la destrucción, sólo trae desgracias y no van a conseguir ningún objetivo". "De eso son todos absolutamente conscientes, ahora la cuestión es cuándo y cómo se acaba. Ojalá se acabara mañana esta pesadilla", concluyó.