El lehendakari apuesta por el trabajo político para "evitar que tengamos que llorar juntos una víctima más"
BILBAO, 24 Nov. (EUROPA PRESS) -
El lehendakari, Juan José Ibarretxe, reconoció hoy en Córdoba, en un acto ante la Asociación Andaluza de Víctimas del Terrorismo, "la responsabilidad de las instituciones por no haber sido capaces de romper antes esa barrera invisible que la violencia inhumana" levantaba ante las víctimas del terrorismo, que han sufrido "muchas veces desde el silencio y la soledad".
El lehendakari aseguró, en las sextas jornadas de esta asociación, tituladas "La Paz y el Apoyo a las Víctimas del Terrorismo", que su presencia es, de forma personal y en nombre del pueblo vasco, "un gesto sincero" para tratar de transmitir "un mensaje profundo de reconocimiento, de memoria y de paz, de reconocimiento y cariño".
"Porque juntos hemos sentido el dolor provocado por el terrorismo. Hoy me habéis dado la oportunidad de acercarme personalmente hasta vosotros para transmitiros la solidaridad de todo el pueblo vasco a quienes habéis sufrido directamente la sinrazón de la violencia", añadió.
Además, indicó a las víctimas que la falta de cercanía de las instituciones se ha debido a que "quizá el dolor era tan fuerte y la presión de la violencia tan insoportable" que no les permitía "sentir, e incluso aceptar nuestro calor y nuestro reconocimiento".
Sin embargo, el lehendakari advirtió de que las instituciones todavía están a tiempo de "decir lo siento" y de llenar ese hueco que un día se abrió con las víctimas del terrorismo". "Sentimos vuestro dolor como propio, sentimos el terrible vacío de cada víctima y sentimos no haber sabido encontrar antes el camino de la paz y detener a tiempo la barbarie del terrorismo", incidió.
Igualmente, apostó por trabajar por la "memoria y la reparación", evitando afrontar un futuro en paz y libertad "desde el olvido o desde la amnesia de lo que sucedió en el pasado, sino desde una lectura crítica del mismo".
INFAME USO DEL NOMBRE DEL PUEBLO VASCO
Ibarretxe reiteró "su condena y rechazo más absoluto" del terrorismo porque "ha conculcado el más elemental de los derechos humanos, el derecho a la vida" y porque, además, "ETA ha cometido la terrible infamia de utilizar el nombre del pueblo vasco, manchando injustamente el buen nombre de un pueblo pacífico y trabajador".
En este sentido, anunció su compromiso institucional para "levantar testimonio del sufrimiento injusto provocado por el terrorismo en personas inocentes". "La memoria crítica del pasado constituye, no sólo el reconocimiento moral a las víctimas, sino el testimonio necesario para que las generaciones venideras no olviden la irracionalidad y la degradación ética que supone el ejercicio de la violencia", añadió.
Además de este reconocimiento moral, el lehendakari dijo que el compromiso con las víctimas del terrorismo debe pasar por "respetar su dolor y reparar su sufrimiento".
El respeto, explicó, consiste en "no utilizar partidariamente el dolor de las víctimas como arma arrojadiza". En cuanto a la reparación, advirtió de que no debe ser sólo moral, sino también material. "Las víctimas y sus familias están en su perfecto derecho de rehacer su vida y mirar hacia adelante, y las instituciones públicas tenemos la obligación de responder a ese derecho", indicó.
PAZ PARA LA CONVIVENCIA
Por otro lado, aseguró que las víctimas de la violencia son "los mejores mensajeros de la paz. Paz con memoria, Paz con Justicia, pero también Paz para la Convivencia".
"Porque, nadie mejor que una víctima es capaz de entender el dolor que produce la violencia. Nadie mejor para desear que ese dolor no vuelva a reproducirse en ninguna víctima más". añadió.
En este sentido, apostó porque su objetivo y el del resto de responsables políticos sea el "trabajar todos los días sin desmayo para acabar definitivamente con la violencia y evitar que tengamos que llorar juntos una víctima más".
Para lograr este objetivo, explicó, el Gobierno vasco ha impulsado su Plan de Paz y Convivencia, "basado en la memoria, en el respeto a los derechos humanos y en el reconocimiento a las víctimas del terrorismo", que propiciará próximamente en el Parlamento vasco el desarrollo de una Ley de Solidaridad con las Víctimas del Terrorismo, que, añadió, pretende ser "un suelo moral y consolidar las medidas de apoyo que venimos desarrollando a través de la Dirección de Víctimas del Terrorismo".
"Por eso quiero trasladaros un mensaje de Paz. Sinceramente, porque pienso que la paz merece la pena. Sólo la paz nos puede abrir el camino a la esperanza y a la convivencia. Acabar definitivamente con la lacra del terrorismo es el mejor homenaje que podemos transmitir a nuestros hijos e hijas para que sepan que la violencia jamás pudo anular nuestra capacidad para amar, para convivir", aseguró.
