Izquierda abertzale llama a los "soberanistas" a aunar fuerzas "para llevar el tren de Lizarra a su última estación"

Actualizado: jueves, 11 septiembre 2008 15:22

Erkizia denuncia la política de "venganza" de PSOE y PP contra los presos y advierte de que "ése no es el camino"

BILBAO, 11 Sep. (EUROPA PRESS) -

La izquierda abertzale hizo hoy un llamamiento a agentes sociales, políticos, sindicales y sociales "soberanistas" a "unar fuerzas" en torno al derecho de autodeterminación "para llevar el tren de Lizarra a su última estación".

En rueda de prensa en Bilbao, los representantes de la izquierda abertzale Tasio Erkizia e Itziar Abellanal, que hicieron balance de los diez años transcurridos desde la firma del acuerdo de Lizarra-Garazi, precisaron que su planteamiento no es a "nivel electoral", sino que propone "una disposición a todos los organismos, agentes políticos y sociales de este pueblo a buscar el camino para la superación del conflicto en términos de dar la palabra y el derecho a decidir de este pueblo".

Abellanal aseguró que la izquierda abertzale apuesta por seguir trabajando "día a día en la construcción de nuestro país e ir creando entre todos condiciones para que los estados francés y español no tengan más remedio que reconocer los derechos que a este pueblo le asisten".

Según dijo, el acuerdo de Lizarra supuso "un antes y un después en la vida política de Euskal Herria, ya que abrió un nuevo ciclo político asentado en el reconocimiento de Euskal Herria como nación y en el respeto a la voluntad y la decisión de la ciudanía vasca".

La portavoz abertzale señaló que Lizarra-Garazi fue "un punto de inflexión" con dos ideas centrales, que son "que la mayoría social y política de esta país da por agotada el actual marco constitucional de negación que no nos deja desarrollar ni estructurarnos como pueblo", así como que "Euskal Herria es una nación y, como tal, tiene sus derechos y que la ciudadanía vasca tiene que ser libre para decidir sobre su presente y su futuro, y para organizarse en torno a un estado soberano, si así lo decide la mayoría de la ciudadanía vasca".

A su juicio, tras la firma del acuerdo de Lizarra se hizo evidente la existencia de dos proyectos políticos enfrentados, "uno decidido a la construcción nacional de este país y otro decidido al sometimiento a España y Francia".

Abellanal señaló que, en ese momento, la "capacidad que Euskal Herria tiene para ser dueña de su futuro y para construir su nación", hizo que los estados español y francés empezaran a preocuparse "al ver peligrar sus proyectos de Estado". Así, denunció que el gobierno español y el PP, "bajo el lema de 'todo es ETA' golpea a cualquier sector que tenga que ver con la construcción nacional en este país".

En ese sentido, aseguró que esta estrategia "sigue presente hoy en día" y acusó al PSOE de instaurar "un auténtico estado de excepción, con el único objetivo de obstaculizar, o al menos intentar que no se produzca, un verdadero cambio político".

Asimismo, manifestó que el resultado de las elecciones autonómicas de 1998 "también asustó al PNV, ya que la coalición PNV-EA no obtuvo los resultados que pretendían y, por primera vez, el PNV ve peligrar su cotas de poder de gestión y su hegemonía política". "Aquí -subrayó- es cuando empieza a incumplir el compromiso adquirido en Lizarra, rompiendo así un acuerdo que había traído muchas esperanzas a la ciudanía vasca".

Tras destacar que la izquierda abertzale "siguió adelante a pesar de los obstáculos y de situaciones muy dificiles, con el objetivo de llevar a buen puerto el nuevo ciclo político generado en Lizarra y lograr un acuerdo político en el que se reconozca el derecho de autodeterminación y la territorialidad para nuestro pueblo", Abellanal criticó que tanto PSOE como PP "dijeron no a la superación del marco político actual de imposición, negación y división", así como a la construcción "de un nuevo marco democrático, donde todos los proyectos políticos tuvieran cabida en igualdad de condiciones".

Asimismo, la dirigente abertzale aseguró que PNV y PSE-EE "no tienen intención de hacer realidad un escenario que abra las puertas a la autodeterminación de Euskal Herria", sino que su pretensión es "hacer desaparecer a la izquierda independentista y diluir la necesidad de la ciudadanía, camuflándolo alrededor de una mera refirnma del marco político actual".

"Después de diez años, nos encontramos en la misma tesitura, o seguir encerrados en esa jaula de la Constitución española o construir un marco democrático que pueda abrir las puertas al derecho de autodeterminación y, por consiguiente, a la opción independentista", aseveró.

CODIGO PENAL

Por su parte, Tasi Erkizia se refirió a las propuestas presentadas ayer por los ministros de Interior y de Justicia, Alfredo Pérez Rubalcaba y Mariano Fernández Bermejo, respectivamente, que se incluyen en el Proyecto de Ley de reforma del Código Penal, entre las que destaca la obligatoriedad de imponer 20 años de libertad vigilada a aquellos violadores y terroristas que salgan de prisión con indicios de reincidencia.

Según denunció, el PSOE y el PP "están llevando una política de venganza contra los presos políticos". Erkizia criticó que "no sólo recortan libertades constantemente, sino que, además, actuan con venganza y odio hacia todo lo que sea reindicar la libertad para Euskal Herria".

"Ése -advirtió - no es el camino y eso es la mejor expresión de que este Estado no es democrático y no está dispuesto a respetar los derechos mínimos y elementales del pueblo vasco".