López dice que PSE no necesita presentar testigos al juicio del 8 de enero "porque no hay nada punible"

Actualizado: jueves, 13 noviembre 2008 13:01

BILBAO, 13 Nov. (EUROPA PRESS) -

El secretario general del PSE-EE, Patxi López, explicó hoy que su partido no ha presentado ningún testigo en el juicio que se iniciará el 8 de enero contra él mismo, el lehendakari, Juan José Ibarretxe, y dirigentes de Batasuna por un delito de desobediencia por las reuniones mantenidas con representantes de la izquierda abertzale porque tienen "la absoluta convicción" de que no los necesitan "porque no hay nada punible".

López, que acudió hoy como invitado del Fórum Europa. Tribuna Euskadi celebrado en Bilbao, aseguró que "lo que hicimos los socialistas fue el intento noble de intentar avanzar en el camino de la paz y conseguir que el mundo que había vivido de espaldas a la democracia se integrara en el sistema democrático".

Tras precisar que la fecha del juicio y sus aplazamientos "no la decidimos nosotros, sino los propios tribunales, que han decidido que empiece el 8 de enero", señaló que va a ser un juicio largo "porque hay más de cien testigos, la mayor parte de ellos por la defensa de Ibarretxe y otra buena parte por la defensa del abertzalismo radical".

López reconoció que "alguno puede tener la tentación de convertir este juicio en un carnaval de todos estos testigos para jugar al apoyo con esta causa". En ese sentido, dijo que hay testigos que son intermediadores de conflictos internacionales en Sudáfrica, Irlanda, Montenegro, etc, "que algunos, imagino, intentarán utilizar no sólo para que testifiquen en el juicio, sino para hacer un discurso que avale las posiciones de quien los ha convocado".

No obstante, se mostró convencido de que la sociedad vasca "reaccionará con normalidad y naturalidad" y consideró que "no ganará apoyos electorales quien haga más alharacas, aspavientos, juegue al victimismo y cante el 'eusko gudariak' en las escaleras de los tribunales", sino que ganará "quien acuda a este juicio con la misma naturalidad y normalidad con la que, espero, la sociedad vasca quiera recibirlo". "Y nosotros -dijo- vamos a ir con mucha tranquilidad".