PP pide el cese de un edil del PNV que "gobierna" con ANV y que dijo estar "a gusto con quien no condena la violencia"

Actualizado: jueves, 10 abril 2008 15:08

Dice que "juega a dos bandas" y que frente a sus mociones, sus alcaldes "se sirven de quien no condena a ETA para retener el poder"

VITORIA, 10 Abr. (EUROPA PRESS) -

El secretario general del PP de Alava, Iñaki Oyarzábal, reclamó al PNV que exija la dimisión de su alcalde en la localidad alavesa de Valdegobía, que dirige el Ayuntamiento gracias al apoyo de ANV y que según los populares "cogobierna" con esa formación, después de que en el pleno convocado tras el asesinato de Isaías Carrasco asegurara sentirse "muy a gusto y no tener ningún tipo de complejo por estar gobernando con quien no condena hechos violentos".

Oyarzábal denunció la situación que se vive en esta localidad alavesa en una rueda de prensa en la sede del PP en Vitoria, en la que estuvo acompañado por la juntera popular Marta Alaña, a su vez portavoz de la Agrupación Valdegobía, afín al PP y que obtuvo la victoria en las elecciones municipales, aunque no logró la mayoría suficiente para gobernar.

A pesar de resultar la formación más votada, esta agrupación empató a cuatro concejales con el PNV, que logró la alcaldía al contar con el apoyo del único edil de ANV.

El dirigente del PP, en referencia a las mociones acordadas por el PNV y el PSE para desbancar a ANV de los ayuntamientos en los que gobierna, denunció que "no puede ser que el PNV juegue a dos bandas, con Urkullu haciendo un discurso que se presenta como firme, mientras que sobre el terreno, los concejales y alcaldes de ese partido tratan de hacer la vida cómoda y se sirven de quienes no condenan el terrorismo para mantener sus cotas de poder".

ACUERDOS "DEFINITIVOS"

Además, aunque manifestó que su partido las apoyará, advirtió de que este tipo de mociones "no bastan", ya que "es necesario llegar a acuerdos definitivos entre los partidos democráticos para que no haya ni un solo ayuntamiento dirigido por ANV-Batasuna, por quienes no son capaces de condenar la violencia". Oyarzábal manifestó el PNV "está tratando de esconder" lo que ocurre en la localidad alavesa "dirigiendo el foco a Mondragón".

Respecto a la situación de Valdegobía, Alaña denunció la actitud del alcalde Juan Carlos Ramírez (PNV) en el pleno celebrado el pasado 28 de marzo y solicitado a petición de su agrupación para condenar el asesinato del ex edil socialista de Mondragón Isaías Carrasco.

Según aseguró, en dicha sesión, y en respuesta a sus preguntas sobre cuánto tiempo iba a seguir gobernando con un partido que no condena los atentados, el alcalde "afirmó textualmente 'estar muy a gusto y no tener ningún tipo de complejo por estar gobernando con quien no condena hechos violentos'".

"Si el PNV está haciendo esa reflexión interna que dice que está haciendo, lo primero que debe hacer es mirar dentro de casa y exigir la dimisión de su alcalde", indicó. En la misma línea, Oyarzábal manifestó que, además de por este comportamiento, Ramírez "no tiene legitimidad" para seguir en el cargo porque gobierna "con los votos de quienes no condenan la violencia".

Además de haber apoyado la investidura del alcalde del PNV, ambos dirigentes populares manifestaron que este partido "cogobierna" con la formación de la izquierda abertzale.

"BENEPLACITO" DEL ABB

La juntera del PP explicó que la colaboración entre los dos partidos no se limitó al voto de ANV a la proclamación del alcalde, sino que en el pleno de Constitución del Ayuntamiento "firmaron que llegaron a un acuerdo de gobierno entre los cinco concejales". "Es un acuerdo de gobierno, y aunque quien lo ostenta todo es la Alcaldía, se tomas las decisiones conjuntamente y como tal actúan". Lo ocurrido en esta localidad de mil habitantes, cuenta, además, "con el beneplácito" de la Ejecutiva alavesa del PNV, según explicó.

Por su parte, el secretario general de los populares alaveses consideró que el respaldo del Araba Buru Batzar (ABB) a esta situación evidencia que "el PNV más radical va del brazo de quien no condena la violencia". A su juicio, la formación dirigida por Iñigo Urkullu "no actúa con valentía y no se atreve a desalojar a Batasuna de las alcaldías", motivo por el que "les insta a que ellos mismos dimitan".