SAN SEBASTIÁN, 4 May. (EUROPA PRESS) -
El pacto entre nacionalistas para "repartirse el poder" en el Consejo de Administración de la caja de ahorros guipuzcoana, Kutxa, es un "ensayo" para una alianza de gobierno tras las forales, según manifestó hoy el portavoz del grupo del PSE-EE en la Cámara de Gipuzkoa, Julio Astudillo.
En un comunicado, Astudillo alertó de que la finalidad de este "pacto entre nacionalistas" es "explorar" una alianza de gobierno en Gipuzkoa tras las próximas elecciones forales. "Esa sopa de letras nacionalistas tiene un profundo carácter frentista, y es contraria a los intereses generales del territorio", incidió el portavoz socialista en las Juntas Generales.
Astudillo manifestó que el Consejo de Administración de Kutxa se sientan ahora, "gracias a PNV y Hamaikabat", quienes están "en contra de los grandes proyectos estratégicos de Gipuzkoa". A su juicio, "prima más el común denominador del nacionalismo que los intereses reales del territorio".
Desde su punto de vista, el "pacto nacionalista" en Kutxa supone un "reparto de poder", pero en el futuro podría llegar "más allá". El portavoz del PSE en el Parlamento provincial se mostró "convencido" de que la apuesta por la "sopa de letras nacionalista, desde una perspectiva de alianza para gobernar en la Diputación de Gipuzkoa, perjudicaría claramente los intereses generales" del territorio.
En este sentido, hizo hincapié en que EA "ha pedido recientemente que se abandone" el proyecto de construcción del Puerto de Pasajes (Gipuzkoa), tras desvincular la regeneración del entorno de la bahía de la construcción de la dársena, mientras que Aralar "también se encuentra en contra de este proyecto estratégico" y del de la 'Y' vasca. Además, añadió que ambas formaciones son contrarias al mantenimiento y la mejora del aeropuerto guipuzcoano de Hondarribia.
