BILBAO, 20 Nov. (EUROPA PRESS) -
El comité de empresa de Bilbobus ha decidido convocar ocho jornadas de paros durante el mes de diciembre, que concluirán el día de Santo Tomás con una jornada de huelga de 24 horas, con el objetivo de reclamar la negociación del nuevo convenio y denunciar los "constantes recortes".
Trabajadores del servicio de autobús de Bilbao se han manifestado este martes por las calles de la capital vizcaína bajo el lema 'No a los recortes, negociación ahora. Bilbobus en lucha', una movilización que ha contado con la participación de unos 250 trabajadores, según los datos aportados por los representantes sindicales.
Los sindicatos que componen el comité de empresa tienen previsto registrar este jueves, 22 de noviembre, la convocatoria de movilizaciones, tras la reunión de la Comisión Mixta con la dirección de la empresa de este miércoles. La convocatoria será sometida a ratificación de la Asamblea de Trabajadores el día 28 de noviembre.
Los paros comenzarán el día 3 de diciembre y se realizarán los lunes, miércoles y viernes. En la primera semana, los días 3 y 5, se han previsto paros de dos horas por turno, mientras que los días 10, 12, 14, 17 y 19 se efectuarán cuatro horas de paro por turno. Finalmente, el viernes 21, en el que Bilbao celebra la tradicional jornada de Santo Tomás, la huelga será de 24 horas.
Las movilizaciones han sido convocadas ante la "situación insostenible" que padecen los trabajadores de Bilbobus, según ha explicado el representante de ELA Gaizka San Miguel.
Entre las reivindicaciones de los trabajadores, se encuentra la negociación del nuevo convenio, después de que el último perdiera su vigencia el año pasado. Desde entonces, ha señalado el representante de ELA, la dirección de la empresa concesionaria "ha dado el no por respuesta" a las negociaciones.
El responsable sindical ha criticado que la empresa alega "una teórica mala situación económica" y, en este sentido, ha apuntado que, pese a que la dirección no ha facilitado las cuentas de 2017, su solvencia "está constatada" porque en el trienio 2014-2015-2016 sus beneficios rondaron los 3,5 millones de euros.
Además, ha explicado que la empresa justifica su posición en el hecho de que "no han salido los pliegos de licitación" del Ayuntamiento de Bilbao, que financia el servicio. Estos pliegos, ha precisado, "tenían que haber salido publicados en el primer trimestre del año y, en este momento, desconocemos cuál es la situación de la licitación".
"EMPEORAN" LAS CONDICIONES
Junto a la reivindicación de la negociación del convenio, los trabajadores denuncian que, en el último año y medio, la empresa ha efectuado "distintos movimientos que están empeorando las condiciones de los trabajadores", como la supresión del personal de retén en el Gautxori que "permitía que los trabajadores pudieran ausentarse para ir al servicio".
Según han censurado desde ELA, no se mantienen "la condiciones de seguridad e higiene mínimos" y la eventualidad es "cada vez mayor", de manera que hay un colectivo de 150 trabajadores eventuales del total de la plantilla, que ronda las 600 personas. Por ello, han advertido, "cada vez hay mayor precariedad".
Asimismo, han criticado que los trabajadores tienen "un bolsín de horas acumuladas que se está yendo por las nubes y no permite hacer uso de ese exceso de horas acumuladas".
También han advertido de los "importantes recortes" que han sufrido colectivos como el taller, que no cuenta con "medios humanos ni materiales" para algunas reparaciones y mantenimientos que "son necesarios".
