El Día Mundial de la Vida Silvestre, que se celebra el día 3, busca concienciar sobre la necesidad de detener la pérdida de biodiversidad
BILBAO, 28 Feb. (EUROPA PRESS) -
La Unesco ha catalogado el estanque del Parque Europa de Bilbao como "un ejemplo de naturalización en el entorno urbano", según ha explicado el Ayuntamiento de Bilbao, que ha indicado que el programa se ha llevado a cabo a través de la cátedra Unesco sobre Desarrollo Sostenible y Educación Ambiental impulsada por la UPV/EHU, Ingurugela y el Ayuntamiento de Bilbao.
La naturalización del parque fue una de las propuestas realizadas hace dos años por el alumnado de 53 centros educativos de la Villa, en el marco del programa de Educación Ambiental de las Agendas 21 Local y Escolar, y donde propusieron que el estanque tuviera ranas y sapos, anfibios en peligro de extinción, tal y como ha informado el Consistorio bilbaino en un comunicado.
El próximo domingo 3 de marzo, se celebra el Día Mundial de la Vida Silvestre, que tiene entre sus objetivos el de concienciar sobre la necesidad de detener la pérdida de biodiversidad y, según ha indicado el Consistorio a través de un comunicado, en Bilbao, la naturalización del Parque Europa ha constituido una "oportunidad para cumplir con ese objetivo".
El Teniente de alcalde y concejal delegado del Área de Movilidad y Sostenibilidad del Ayuntamiento de Bilbao, Alfonso Gil, ha explicado que los parques urbanos son un "instrumento fundamental para fomentar la educación ambiental y potenciar la presencia de la naturaleza en un entorno urbano".
En este sentido, la investigadora de la Cátedra de UNESCO sobre Desarrollo Sostenible y Educación Ambiental de la UPV/EHU, Leire Méndez, ha asegurado que la naturalización de la ciudad contribuye a "mejorar la calidad de vida y que disfrutar del ocio, ofrecer servicios culturales y mejorar la salud mental, e incluso reducir costes económicos, son algunos de los beneficios de la recuperación de la vida silvestre en el entorno urbano".
La investigadora ha explicado que "cuando la infraestructura gris de una ciudad se combina con la naturaleza es posible mejorar la calidad ambiental, atraer la biodiversidad o fomentar la relación de las personas con el entorno natural".
El Parque Europa, situado en el barrio de Txurdinaga, fue inaugurado en 1988 y es un área de esparcimiento de 107.000 metros cuadrados, que cuenta con un estanque de casi 700 m2, centro neurálgico de la zona verde.
"Es un espacio con un gran potencial para recrear humedales, avistar aves, observar insectos y mejorar el medio ambiente urbano", ha asegurado Leire Méndez.
CENTROS EDUCATIVOS
El Consistorio bilbaíno ha recordado que la universidad pública vasca y el Ayuntamiento de Bilbao recogieron hace dos años el "reto" propuesto por el alumnado de 53 centros educativos de la Villa, en el marco del programa de Educación Ambiental de las Agendas 21 Local y Escolar.
Los escolares de la ciudad solicitaron que el estanque del parque tuviera ranas y sapos, anfibios en peligro de extinción. "El objetivo, por tanto, fue crear una charca que proporcionara un nuevo hábitat apropiado para aves y anfibios, y, al mismo tiempo, un 'laboratorio en la naturaleza' para la educación", ha concretado Leire Méndez. De esta manera el parque se acerca a un modelo que permite aumentar la biodiversidad en la ciudad.
Para aumentar el conocimiento del estanque, poner en valor la importancia de crear zonas para la biodiversidad -que además sean captadoras de emisiones de CO2- y dar a conocer que si se respeta, el municipio estará dotado de un aula ecológica al aire libre, durante los meses de noviembre, febrero y abril han sido organizados talleres dirigidos al alumnado del programa Agenda 21 escolar, según han indicado.
Este año, en los citados talleres han podido participar, además, las familias y personas interesadas en la jornada organizada el día 2 de febrero con motivo del día mundial de los humedales. En estas iniciativas se establece un coloquio con el alumnado, para que pueda conocer cómo se ha ejecutado el proyecto, qué especies vegetales han sido utilizadas para la revegetación (todas ellas autóctonas), y qué es lo que va a ocurrir si le dejamos tiempo a la naturaleza para que actúe sobre el humedal y sus alrededores.
En los talleres se ha podido observar cómo se ha producido un incremento progresivo de la biodiversidad del humedal, se han avistado especies de aves como mirlos, gorriones, petirrojos, curruca capirotada, zorzal común, mito, carricero común, pinzón vulgar, o jilgueros, anfibios como el sapo partero común y reptiles como la lagartija roquera, además de libélulas y caballitos del diablo.
