BADAJOZ, 11 Sep. (EUROPA PRESS) -
La muestra que durante el pasado mes de agosto y hasta el próximo 30 de septiembre acoge el Museo de Bellas Artes de Badajoz (MUBA) ha propiciado la aparición de nuevos datos del mueblista Pajuelo Carballo, aportados por un nieto del artista.
Entre otros destacan su nombre de pila, Román, su trágica muerte y que se dedicó fundamentalmente a la restauración y a la pintura decorativa, según informó el citado museo en nota de prensa.
La exposición consiste en un espectacular biombo con escenas de la pasión de Cristo y de una alegoría de la Segunda República Española. La muestra se inscribe en la labor que la pinacoteca viene desarrollando desde hace más de un año para exponer periódicamente algunas piezas que se encuentran dentro de sus nutridos almacenes y que por falta de espacio no puede incorporar a las colecciones que están expuestas permanentemente. Es lo que el MUBA denomina 'Proyecto Obra de almacén'.
Los nuevos datos proporcionados por el nieto del pintor, Marcos Pajuelo Gómez, indican que no se llamó Ramón sino Román, que nació el 7 de febrero de 1879 en la localidad próxima de Valverde de Leganés, desde donde se desplaza diariamente a Badajoz para recibir enseñanzas artísticas en la que llegó a ser posteriormente Escuela de Artes y Oficios.
Más tarde se trasladó a vivir a Badajoz donde se dedicó fundamentalmente a la restauración y a la pintura decorativa, por tanto fue pintor más que mueblista como se le consideraba hasta ahora. Fue mientras restauraba un retablo en la parroquia de San Agustín de Badajoz cuando sufrió un accidente mortal en el año 1951 intentando montar un andamio.
Román Pajuelo Carballo, además de trabajos de restauración de cuadros, imágenes y retablos, hizo obras muy personales para familias burguesas de Badajoz como los señores Lancho, Salas, Morales, Roa. Calzadilla, etc. Aún hoy estas familias conservan en sus domicilios obras del artista.
Su nieto, a quien el MUBA agradece su colaboración, ha facilitado varias obras, incluso fotografías del artista que permiten corregir otro error en un retrato realizado por Antonio Caldera que se creía representaba a Román Pajuelo cuando el personaje retratado no responde a su figura sino a la de un mueblista pacense no identificado por ahora.
NUEVAS OBRAS APARECIDAS
Entre las nuevas obras aparecidas se han documentado un óleo sobre lienzo, de formato apaisado y de 80 x 130 centímetros, que representa un fragmento de un cuadro de Velazquez titulado Cristo y el alma cristiana, obra adquirida en Madrid en 1858 por el pintor y viajero inglés Sir Jhon Savile Lumley, quien lo donó a la Galería Nacional de Londres donde se encuentra actualmente. Román Pajuelo representa en esta obra a Cristo sentado en el suelo y amarrado a la columna en un gesto de dolor y tristeza.
También, en formato, medidas y soporte similar al anterior se ha recuperado una virgen Dolorosa que representa a María coronada con los atributos propios de la iconografía de esta representación, es decir, con la corona de espina y los clavos de la cruz como símbolos de la pasión de Cristo. Se la representa como es habitual en busto prolongado y el corazón atravesado por el puñal en una expresión de dolor.
Asimismo, en un tercer lienzo con unas medidas de 100 x 170 centímetros y más deteriorado, Román Pajuelo representó su paleta de pintor con su firma y en forma ovalada y rodeada de flores y angelotes.
Finalmente, se ha descubierto también un conjunto de siete pinturas sobre cristal de reducido tamaño (18 x 13 centímetros) que acreditan a Román Pajuelo como un auténtico experto en esta difícil técnica de la pintura sobre soporte vítreo y como un miniaturista bien dotado.
El Museo de Bellas Artes de Badajoz indicó que se siente "muy satisfecho" tanto con la aparición de esta obras y otras detectadas en otros domicilios pacenses como con la ampliación y revisión de los datos de este "notable" artista, que fue Román Pajuelo Carballo. Se cumple así una de las funciones menos conocida en los museos cual es la de investigación y documentación sobre artistas y sus obras.
