CARMONA (SEVILLA), 28 Jul. (EUROPA PRESS) -
El director científico del Consorcio de la Ciudad Monumental de Mérida, Miguel Alba Calzada, ha asegurado que la característica más interesante de esta ciudad extremeña es que siempre se le respeta como un yacimiento unitario porque el consorcio gestiona todos sus monumentos, así como también su propia actividad arqueológica.
Miguel Alba, quien ha participado en los cursos de verano de la Universidad Pablo de Olavide (UPO) en Carmona (Sevilla), ha explicado que para que Mérida llegara al Consorcio histórico, artístico y arqueológico de la Ciudad Monumental, ha tenido que pasar antes por el patronato de la ciudad monumental a partir del año 1996, "y muy en relación con la declaración de Patrimonio de la Humanidad de Mérida", se llegó a lo que es hoy este consorcio.
Durante su ponencia, el arqueólogo ha hecho referencia a las distintas actividades que se llevan a cabo en los departamentos del consorcio. Uno de ellos se dedica a las excavaciones, al menos, una docena al año, a pesar de que "estamos en una etapa de coyuntura económica poco propicia para la construcción". Otro departamento se ocupa de la conservación, que "procura que todos elementos romanos, sobre todo, y de otras épocas lleguen a las generaciones futuras en las mismas condiciones en las que nos ha llegado a nosotros".
El consorcio también cuenta con departamentos encargados de la investigación porque "Mérida sigue siendo un diamante en bruto", según Alba, quien ha puesto en valor la labor del departamento de difusión y didáctica en contacto con los ciudadanos, sobre todo escolares y estudiantes de institutos, que serán los ciudadanos del mañana y "a los que interesa concienciar".
Miguel Alba también ha destacado que Mérida es la ciudad representativa de cómo era una ciudad romana porque "fue la capital de Lusitania". Asimismo, ha explicado que se trata de una ciudad con abundantes restos romanos, pero que también es rica en arte rupestre de tipo esquemático y en grabados "que podemos encontrar en toda la comunidad extremeña".
Por último, el arqueólogo ha señalado la importancia del respeto que la construcción tiene hacia la ciudad. "Con la llegada del ferrocarril empezó el crecimiento de Mérida pero sin afectar a los restos arqueológicos", resalta Alba, quien subraya que "nosotros no hacemos construcciones subterráneas sobre yacimientos, tengan o no tengan importancia porque es algo que siempre hemos respetado para poder seguir mostrando al público la riqueza arqueológica que mantiene desde sus comienzos como ciudad".
